Reciclaje de aviones, una próspera industria en auge
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La preocupación por el medio ambiente es un tema global. Controlar la emisión de gases de efecto invernadero y reutilizar materiales como plásticos, cobre, aluminio y hierro son objetivos clave para las grandes potencias. Los países industrializados intentan crear conciencia sobre el cuidado del ecosistema mediante diversas estrategias, con el fin de preservar la vida en el planeta.
El reciclaje se presenta como una alternativa ecoeficiente, ya que permite reducir la tala de árboles, la contaminación del aire y la dispersión de partículas que deterioran la calidad del ambiente. A nivel mundial, los desechos químicos y metálicos representan un problema para los gobiernos, lo que convierte al reciclaje en una pieza clave de las políticas medioambientales. Ya no solo se reciclan dispositivos electrónicos o vehículos viejos, sino también aviones, que constituyen una carga ambiental que debe gestionarse. El retiro de una aeronave es un proceso complejo, lo que plantea la pregunta: ¿cómo se recicla un avión y qué uso se le da a las piezas resultantes?
El proceso comienza retirando los equipos y componentes que pueden reutilizarse en otras aeronaves, tras la correspondiente certificación. Los demás materiales se reciclan mediante logística inversa, planificando el traslado de materias primas a puntos de recogida para su reutilización o eliminación responsable. Este proceso incluye el desmontaje de los materiales, siempre bajo estándares respetuosos con el medio ambiente. Se estima que en los próximos años será necesario reciclar más de 20,000 aeronaves que dejarán de volar por obsolescencia tecnológica.
El Aeropuerto de Teruel, en Aragón, ha sido pionero en este campo. A través del Grupo Airbus, ha desmantelado aeronaves de marcas como Boeing, Airbus y Bombardier, logrando reutilizar más del 90% de sus componentes. Esta iniciativa contribuye significativamente a la preservación del medio ambiente.
El desmantelamiento de aeronaves es una alternativa clave en el reciclaje moderno. Pedro Lama, gerente de Aviation International Recycling SL (AIR), empresa dedicada al reciclaje de aviones en Europa, destaca la inversión de 30 millones de euros realizada por el grupo López Soriano para construir un hangar en el aeropuerto de Teruel, específicamente para esta labor.
El desarrollo de la ingeniería aeronáutica y el avance tecnológico exigen la modernización de muchas aeronaves, lo que genera una creciente necesidad de reciclarlas siguiendo lineamientos internacionales y respetando el ecosistema. AIR, miembro de la Junta Directiva de AFRA (Aircraft Fleet Recycling Association), promueve prácticas sostenibles en el desmantelamiento y reciclaje de aviones.
Se calcula que la vida útil de un avión comercial oscila entre los 27 y 30 años. Al final de su ciclo, sus partes, si están en buen estado, pueden reutilizarse como repuestos para otras aeronaves. Según Pedro Lama, AIR se especializa en el desmantelamiento y reciclaje de aviones, con más de tres décadas de experiencia en el sector. Como líder de este mercado, Lama explica el complejo proceso de reciclaje de aeronaves.
"Nos dimos cuenta de que en un periodo de 20 a 30 años habría una gran flota de aviones en desuso, especialmente de primera generación. Realizamos estudios y negociamos la adquisición de estas aeronaves para aprovechar la mayor cantidad de materiales posible, gracias a las políticas medioambientales en Europa", comentó Lama. Añadió que en Norteamérica, los aviones en desuso suelen quedar estacionados por más tiempo, lo que representa una oportunidad para desarrollar el negocio del reciclaje.
AIR impulsa proyectos de desmantelamiento y reciclaje en Teruel y otras ciudades europeas, contribuyendo al manejo responsable de aeronaves fuera de servicio. Las piezas valiosas, como motores y sistemas electrónicos, son etiquetadas, inventariadas y embaladas para ser reutilizadas. Los materiales no recuperables se procesan y reciclan en instalaciones especializadas.
En cuanto a la normativa, AIR opera bajo las estrictas regulaciones medioambientales europeas y sigue los procedimientos establecidos por AFRA. Con una triple acreditación, AIR lidera el mercado europeo del reciclaje de aeronaves, contribuyendo tanto a la industria como a la protección del medio ambiente.
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Javier Hernández Fernández
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