Colombia: Expresidente Juan Manuel Santos pide perdón por los "falsos positivos"

El expresidente colombiano y Nobel de Paz, Juan Manuel Santos, pidió hoy "perdón" a las madres de las víctimas de los crímenes extrajudiciales cometidos por militares, cuando se desempeñó como ministro de Defensa, durante el gobierno de Alvaro Uribe.

Santos habló este viernes ante el pleno de la Comisión de la Verdad, organismo creado por el acuerdo de paz con las FARC que él impulsó, en el marco de las indagaciones que se adelantan para conocer lo sucedido alrededor de estos crímenes conocidos localmente como "falsos positivos".
    
"Me queda el remordimiento, me queda el hondo pesar, que durante mi ministerio muchas madres, muchísimas madres, incluidas las de Soacha, perdieron a sus hijos por esta práctica tan despiadada", afirmó el exmandatario en audiencia pública.
    
"Unos jóvenes inocentes —continuó Santos— que hoy deberían estar vivos. Eso nunca ha debido pasar. Lo reconozco y les pido perdón a todas las madres y a todas sus familias víctimas de este horror, desde lo mas profundo de mi alma. Que esto nunca, nunca, vuelva a pasar", urgió.
    
Al menos 6.402 personas fueron asesinadas entre 2002 y 2008 por parte de militares. Se trataba en su mayoría de jóvenes de barrios empobrecidos que engañados con ofertas de trabajo eran trasladados a sitios distintos a su residencia para asesinarlos y hacerlos pasar como supuestos guerrilleros muertos en combate.
    
Los militares acudían a estos crímenes para presentar cifras de su supuesta lucha antisubversiva y a cambio los uniformados recibían estímulos y permisos.
    
Estos crímenes ocurrieron durante el gobierno de Alvaro Uribe (2002-2008), del que Santos fue su ministro de Defensa entre 2006 y 2009.
    
El expresidente atribuyó estos asesinatos extrajudiciales a la presión entonces ejercida sobre las tropas para presentar bajas en combate, en plena lucha que el Estado adelantaba contras las entonces FARC, en un periodo en el que le propinó sendos golpes militares.
    
"No me cabe duda que el pecado original, lo que dio pie a estas atrocidades, fue la presión para producir bajas y todo lo que se tejió alrededor de lo que muchos han llamado la doctrina Vietnam", argumentó.
    
Santos hizo un recuento sobre la manera en la que al interior del ministerio de Defensa se descubrieron estos casos, que en principio él creyó que se trataba de rumores que hacían parte de una supuesta "guerra" jurídica para desprestigiar a las tropas en momentos en que arreciaban y propinaban derrotas a las FARC.
    
Sin embargo, una serie de investigaciones promovidas al interior de la cartera de Defensa revelaron que lo que figuraba como un rumor se convirtió en una realidad, que causó un enorme desprestigio a las fuerzas militares.
    
Recordó que cuando las pruebas fueron irrefutables, se ordenó la destitución de 20 oficiales, incluidos varios generales, y siete suboficiales del Ejército, y argumentó que el expresidente Uribe no se opuso a ninguno de las decisiones que tomó frente a estos delitos.
    
"En honor de la verdad tengo que decir que el presidente Uribe no se opuso al cambio de esta nefasta doctrina que él mismo había estimulado. Nunca recibí una contraorden, ni fui desautorizado", afirmó.
    
Santos aseguró en su intervención que el Ejército de su país, frente a la "responsabilidad moral" que le cabe por permitir que esto se diera, debería "pedir perdón" y estimó que una decisión en ese sentido le "haría un gran bien" a esa institución.
    
El expresidente le dijo a los comisionados que esta era "su verdad", apoyada con una serie de documentos que entregó a la Comisión, y les pidió que su versión fuera contrastada con otras fuentes para que "nunca más se repitan estos hechos atroces".