El jefe del ejecutivo nipón dijo ante la Cámara Baja de la Dieta (parlamento) que la infección surgida en China en diciembre pasado tiene un gran impacto en la economía japonesa, principalmente en el sector del turismo

No obstante, aseguró que implementarán las acciones necesarias en coordinación con la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el óptimo desarrollo de la cita multideportiva prevista para el venidero verano, del 24 de julio al 9 de agosto.

La semana pasada la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, desmintió los rumores en torno a la posible cancelación del evento deportivo internacional.

Abe también explicó a los legisladores que ya comenzaron a desarrollar pruebas rápidas para detectar el nuevo coronavirus, mientras el ministro de Salud, Gaku Hashimoto, declaró que los fabricantes de mascarillas faciales trabajan 24 horas para reducir la escasez de esos medios de protección.

China está inmersa en una batalla sin descanso contra el coronavirus y su consecuente neumonía que ya dejó al menos 361 muertos y obligó a decretar la emergencia máxima en 31 de sus 34 demarcaciones administrativas.

La infección ya se ha extendido a otros países del sureste asiático y también se han detectado casos en Europa y América