El lento y sostenido desplome de Trump

Se reitera un criterio, continua disminuyendo el apoyo de su conocida base electoral a Trump.

Así lo reflejó el periodista David Lauter este miércoles en el diario Los Ángeles Times al informar el resultado de una investigación.

Se trata de sondeo realizado por la Universidad de Berkeley en  California.

El periódico comenta que el respaldo entre los republicanos y otros votantes conservadores cae en medio de la  pandemia y sus efectos económicos asociados.

La investigación muestra a Trump por detrás de Biden, quien marcha al frente con 39 puntos porcentuales, 67 por ciento a 28.

O sea, 9 puntos más que el margen por el cual Hillary Clinton ganó allí  en 2016.   

El Times precisa que los asistentes de ambos candidatos creen que el factor más importante en el declive de Trump “es el miedo al coronavirus y la creencia de que la administración ha fallado en su manejo”.

Alrededor de dos tercios de los votantes de California estiman que la amenaza para la salud empeora.

El 84 por ciento de ellos respaldan a Biden, y solo el 11 a Trump.

En ese contexto  Trump sacó de su responsabilidad al  jefe de gabinete, Mick Mulvaney.

La cadena CNN informó que la destitución ocurrió mientras Mulvaney estaba en un viaje personal.

El suceso corroboró el estilo caótico impuesto en la Casa Blanca durante años.

Para observadores resultó extraño que el jefe de gabinete dejara Washington cuando la administración republicana, es muy criticada por su respuesta a la pandemia.

Sin ofrecer explicaciones sobre su decisión, Trump señaló  que Mulvaney será enviado especial de Estados Unidos para Irlanda del Norte.

Expertos consideran que los tres jefes de gabinete anteriores Reince Priebus, John Kelly y el propio Mulvaney trataron de probar sus diferentes estilos de trabajo, pero el resultado fue el mismo: el Presidente toma las decisiones, los debilita y casi siempre conocen de su despido en Twitter.

Junto a ello varias renuncias: 

Las renuncias de Rex Tillerson, Secretario de Estado; Gary Cohn, director del Consejo Económico Nacional y ex presidente de Goldman Sachs Group Inc.; Hope Hicks, directora de comunicaciones, una de las ayudantes más antiguas y de confianza;  y  Rob Porter, secretario personal de la  Casa Blanca. 

Con ese historial en muletas aguarda Trump los comicios generales del 3 de noviembre próximo.