Dos joyas en la Quincena de cine francés

La Habana recupera paulatinamente su variada vida cultural. Los teatros y cines están abriendo. Los habaneros acuden a las salas cumpliendo con las reglas implementadas. Parece estar más asumida la necesidad de cuidarnos entre todos. La Quincena de cine francés ha sido uno de esos regalos tempraneros de la vuelta a la nueva normalidad.

El país galo cuenta con una industria cinematográfica sólida, de gran calidad, protegida por el estado y apoyada por los espectadores. Hasta el día 15 de noviembre vamos a poder disfrutar de una interesante muestra que agrupa varios géneros. 

A continuación, dos filmes que recomiendo:

Mes provinciales. Director: Jean-Paul Civeyrac.
Con:AndranicManet, Gonzague Van Bervesselès, Corentin Fila.

Una realización impecable donde sobresale la actuación de AndranicManet, encarnado en un joven y complejo personaje que se muda a París para estudiar cine. La interacción con sus compañeros de carrera propicia conflictos ricos y perfectamente bien estructuradose incitan en el espectador una gama de meditaciones que van desde las consecuencias de emigrar dentro de su propio país o desde el extranjero, hasta cierto sentimiento de culpa dirigido a sus padres, por haberles legado un mundo bastante desesperanzador.

Las complejidades del proceso de creación, la duda sobre el propio talento, la vacilación entre el amor y la atracción física. El suicidio de un compañero, a quien unos califican de genio y otros de ególatra. Un piano que el protagonista no aprende a tocar bien, y que resurge al final del metraje, nos echa en cara que dejemos cuestiones inacabadas a lo largo del camino. Todo, plasmado en una nostálgica gama de blanco y negro, que reverencia lo mejor del cine europeo.

Un filme que evoca en casi dos horas una síntesis de temas cruciales de la contemporaneidad y revela, con esa sutileza que es excelencia en la creación artística, algunas de sus causas.

La actuación de AndranicManetha resucitado mi experiencia al ver la primera película de RyanGosling, hace más de una década. En aquel entonces me dije: he aquí un actor con una batería de emociones que reúne y dispersa a su antojo, pero en una gradación que resulta perfecta, fotograma por fotograma, a la manera en que solo los grandes son capaces de hacerlo.  

Mes provinciales.Cine La Rampa. Viernes 13 de noviembre. 6 pm.

Dos hijos. Director: Félix Moati.
Con: MathieuCapella, Anaïs Demoustier, VincentLacoste,  BenoîtPoelvoorde.

No es común que la disfunción familiar venza al amor. Sucede en ocasiones, no puede negarse. Pero lo usual y lo que debería ocurrir es lo contrario. De eso trata este filme.

Un padre que no sabe lidiar con la realidad. Un hermano mayor que miente y engatusa descaradamente. El menor miembro de esta familia, con el fulgor en los ojos de quien está decidido a hallar la verdad por más resbaladiza que sea, acaba por revelarse contra lo que debían ser sus roles modélicos. Les echa en cara toda la falsedad en la cual viven y lo obligan a vivir.

Joachim es libertad pura. Odia y lo grita. Ama y no se lo calla. Y la amada no puede menos que acabar por responderle de igual manera. El resplandor primero ciega. Luego atrae y envuelve. 

La honestidad del muchacho es un choque para su padre y su hermano mayor, que los hace reflexionar sobre sí mismos. Y Joachim también madura en un proceso de retroalimentación hermoso y útil.

Película en clave de humor. Sutil. Negro en ocasiones. Esperanzador alo largo de la proyección. 

Dos hijos. Cinemateca. Domingo, 15 de noviembre. 5 pm.