Yudaris Sánchez: El 2017, ¿año de consagración definitiva?

Ver los toros desde la barrera siempre produce un sabor amargo. Para la luchadora cubana Yudaris Sánchez (69 kg), el 2016 de cierta manera fue eso, un trago amargo, pues no pudo clasificarse a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, luego de imponerse apenas una semana antes en el Panamericano de mayores de Frisco, Estados Unidos. Esa ciudad le provocó un sabor agridulce, a la vez que le brindó vasta experiencia sobre qué elementos de su sistema de combate mejorar.

En definitiva en la ciudad Maravillosa fue la japonesa Sara Dosho, quien se coronó, en cruenta batalla definida 2-2 sobre la rusa Nataliya Vorobyova. Así sonaron los truenos en su división, que en el ámbito doméstico, tampoco será una panacea preservar la condición de primera figura, pues la experimentada Catherine Videaux, ascendió de los 63 a esa categoría de peso. La última batalla entre ambas, como parte de la Gala de Campeones, fue dominada por Yudaris 15-6.

Sobre la posibilidad de asistir al Mundial de París, entre el 21 y el 27 de agosto, y que el 2017 se convierta en su año de consagración, a pesar de contar únicamente con 20 años, la gladiadora gemela, natural de Ciego de Ávila, accedió a dialogar con CubaSí:

¿Qué falló en el clasificatorio de Frisco?

“Perdí en el primer combate con la misma canadiense (Dorothy Yeats) que me derrotó 6-0 en los Panamericanos de Toronto. Luego vencí a la estadounidense con un volteo, a falta de poco segundos. Ya el mal estaba hecho, pues solo las finalistas accedían a Río.

En el Golden Grand Prix de Azerbaiyán el volteo no pude tirarlo con efectividad. Eso se combinó con la ansiedad de incursionar en un torneo de gran nivel y me pasó factura”.

Sus verdugos en suelo azerí resultaron ser la Tamyra Mensah, de Estados Unidos, por pegada, y luego en la repesca la local Elis Manolova por reñido 5-3.

¿Sientes que esas experiencias negativas han ampliado tu visión sobre la lucha?

“Justamente sobre eso estoy trabajando. Con la ayuda del profesor dirigimos los esfuerzos en cada sesión a pulir el tackle, elevar la explosividad, ganar en efectividad en cada entrada a las piernas. Los profesores Elio Garraway, Alejandro Valdés y ahora Filiberto Delgado, me están ayudando mucho en ese sentido. Técnicamente también llevo a la par el desarrollo de la defensa, especialmente en acciones continuadas sobre el colchón y la de las piernas en la posición de pie”.

¿Recursos ofensivos y ejercicios esenciales en los entrenamientos?

“La fuerza física, mi constitución, me ayuda mucho. La vuelco en función de los diferentes movimientos técnicos.

¿La presencia de Catherine en esta división?

“Claro. Eso me obliga a mantener la tensión en todo momento. Siempre es bueno tener rivales de calidad en casa, aumenta mis motivaciones. Demandará de mí mayor esfuerzo y próximamente en la primera Categoría en Santiago de Cuba, tendremos otro duelo importante”.

¿Desterrada la ansiedad en este comienzo de año?

“Con un repertorio más amplio de variantes ofensivas, intentaré controlar igualmente mis emociones, suelo ser impulsiva y pese a practicar un deporte de combate, los análisis y la disciplina táctica son esenciales en la lucha. Nosotras tenemos una ventaja: desde el inicio en la pirámide escolar practicamos lucha, lo cual ha contribuido a que nuestra llegada al equipo nacional de mayores, siendo juveniles, no haya sido tan brusca, con tantas lagunas técnicas fundamentalmente”.

Con 20 abriles, Yudaris se muestra optimista de cara al año que se avecina. Si su progresión se materializa, debe convertirse en una sólida aspirante a incursionar en Tokio 2020. Esperemos que no choque como de cara a Río dos veces con la misma piedra.

Catherine, al igual que Jacqueline Stornell, plata en Azerbaiyán, fueron pioneras en la práctica de la lucha libre femenina en nuestro país, cuando pocos meses antes de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Cartagena de Indias 2006, fueron llamadas provenientes del judo, para incursionar en la disciplina de los tackles y desbalances. Hoy, una década después, ambas se mantienen en la armada élite. Stornell se probó al máximo nivel con el subtítulo en el Golden Grand Prix, mientras Videaux ostenta un quinto escaño del orbe, y cruentas batallas con equilibrio de victorias y derrotas ante varias de las mejores exponentes de los 63 kg del planeta, entre ellas la estadounidense Elena Pirozhkova y la colombiana Jacqueline Rentería.