Baracoa en el lente de fotógrafos de EE.UU. y Cuba

Baracoa en el lente de fotógrafos de EE.UU. y Cuba
Fecha de publicación: 
12 Abril 2012
0

 

La muestra Visión compartida, inaugurada hoy en la galería Carmen Montilla de La Habana Vieja, invita al redescubrimiento de Baracoa (extremo Oriente), la ciudad primada de Cuba, a través de las lentes de fotógrafos de la isla y Estados Unidos.

  Instalada en esta capital como parte de la III Jornada Fotográfica Latinoamericana, la exposición aúna la mirada escrutadora, la técnica compositiva y la sensibilidad de los cubanos Lissette Solórzano y José Julián Martí, y los estadounidenses Theresa Segal y James Quine, quienes -según contó este último- emprendieron en 2003 esta aventura documental y artística.

Quine manifestó que las instantáneas exhibidas en esta muestra constituyen el fruto de diez jornadas de trabajo, desandando, cámara en ristre, las calles de la villa auroral cubana y la geografía de sus alrededores.

Tal iniciativa fue posible gracias al empeño de los miembros de la Asociación de Amistad San Agustín-Baracoa, que hermana a esas dos ciudades, cuyas fechas fundacionales respectivas son las más antiguas de Cuba y Estados Unidos.

En blanco y negro o en colores, Baracoa aparece esta vez sin afeites ni artificios ante el espectador, quien ve desembrollarse lentamente -pero desmintiendo la previsible quietud de las fotografías- el curso lánguido de los días en aquel mágico rincón de Cuba.

La mudez de las efigies religiosas, los viejos objetos dejados en un abandono amable (el sillón marcado por multitud de espaldas o por los retornos de una sola) y los hombres (unas piernas, unos pies sin cuerpo, unos brazos caídos) remedando el mundo apacible de los objetos; edificios que proyectan su belleza, su señorío marcado por el tiempo: son algunas de las rostros de esta exposición.

Pero otras visiones también asaltan a quien observa: aquellas instantáneas que discursan sobre la magnificencia de la naturaleza y la insignificancia humana, encuentran su contrapunto en la muchachada en la playa, en un joven que vadea el río Miel al mando de sus caballos, en el hombre que cobija su casa con las pencas de las palmas cubanas.

Visiones compartidas devela retazos de la ciudad actual y sus inmediaciones, bosqueja el ritmo vital de los lugareños y, de esa manera, levemente, estremece y revitaliza los contrafuertes del mito que acompaña a la villa fundada por Diego Velásquez en 1511: Baracoa no es primera ni última porque ella misma es una absoluta metáfora del tiempo.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.