Paz tiene rostro de esperanza, afirma en Cuba Pérez Esquivel
especiales
La paz tiene un mismo rostro y es el de la esperanza, afirmó hoy el intelectual argentino Adolfo Pérez Esquivel, quien llegó a Cuba para participar en el VIII Congreso Universidad 2012.
Cuando uno ve que un niño le sonríe a la vida, ahí encontrará la paz, subrayó en conversación con Prensa Latina el Nobel de la Paz en 1980, para quien el premio debe ponerse al servicio de los pueblos.
"La paz tiene rostros de hombres, mujeres, niños y ancianos, que sonríen a la vida. Esa es la diferencia", expresó Pérez Esquivel, quien mañana hablará ante el plenario sobre desarrollo sostenible.
Ahora, qué hacemos, nos quedamos en la angustia existencial o tratamos de cambiar todo esto, se preguntó el académico tras explicar que debe lucharse por los caminos de la liberación.
El Premio Nobel depende de como lo emplees, algunos lo han utilizado para nada. Yo lo utilizo como instrumento al servicio de los pueblos, porque si no está al servicio de los pueblos no sirve, señaló.
Tal galardón, añadió, debe estar al servicio de los pueblos, abrir posibilidades, que la voz sea oída.
No es para uno, fíjate que cuando lo asumí lo hice a nombre de los pueblos de América Latina y también de Cuba, manifestó en medio de los flashes de asistentes al foro, que quisieron irse con una instantánea junto al luchador social.
Interrogado sobre la cercanía de conflictos, Pérez Esquivel aseguró que el mundo es complejo, conflictivo y para nada en blanco y negro, pero estamos viviendo -dijo- en un mundo interesante y tenemos que cambiarlo para eliminar las injusticias.
Tenemos que superar estos conflictos a través de la unidad de los pueblos, a través de la conciencia crítica, la construcción de nuevos paradigmas de vida, no hay que desesperarse, expresó.
Sobre las opciones de paz o de guerra, el científico social expresó el interés de construir la primera para evitar que mueran de hambre 35 mil niños cada día, una situación para la que no hay tiempo.
En Latinoamérica, expuso, estamos indignados todos los días frente a las injusticias, el hambre, la miseria y la pobreza.
Acerca de su ausencia de Cuba por más de una década, Pérez Esquivel significó que nunca se fue de acá, pues siempre estuvo pendiente de lo que ocurría y trató de apoyar en lo que estaba a su alcance.
Añadir nuevo comentario