Ajedrez: Añoranza por un campeón cubano

Desde pequeño siempre me sedujo el ajedrez, el llamado juego ciencia siempre ha sido un enigma para mí, pero con el paso del tiempo algunos de los misterios de este juego fueron solucionándose, a la vez que otros fueron apareciendo, pero los nuevos enigmas no estaban solo relacionados con el juego, también aquellos que lo practicaban, especialmente los ajedrecistas cubanos.

Como apasionado del juego, soy seguidor desde hace años de sus principales exponentes en la isla, sigo los resultados tanto de Leinier Domínguez, Lázaro Bruzón, Yuniesqui Quesada, Isam Ortiz, entre muchos otros que han puesto en alto el nombre de Cuba en el mundo de reyes, reinas, caballos, peones y demás, en su andar por 64 casillas.

La primera figura del ajedrez cubano en la actualidad es sin duda Leinier Domínguez, en quien están centradas las mayores esperanzas del juego ciencia en nuestro país, por lo que es normal esperar siempre que de lo mejor de sí cada vez que compita en un evento, lo cual lo hace, a pesar de que algunos piensen que no es así, porque hace muchas tablas, o no juega agresivo, que es muy conservador a veces, y demás opiniones.

Claro que ahora que el Ídolo de Güines está en el lugar 10 dentro del ranking ELO de los mejores jugadores del planeta, mucho más le exigirá su público, especialmente si compite en casa en el certamen más importante del ajedrez en Cuba: el Capablanca in Memoriam.

Recientemente concluyó en La Habana este torneo el cual tuvo como ganador en el grupo Élite al Gran Maestro (GM) filipino Wesley So, con 6.5 puntos de 10 posibles, escoltado por los GM cubanos Lázaro Bruzón y Leinier Domínguez, con 5,5 y cinco unidades, respectivamente puntos, respectivamente.

No lo hizo mal Leinier, solo que el filipino se presentó en una forma envidiable y arremetió sin piedad ante sus rivales, obteniendo victorias claves ante los jugadores de mayor ELO de la justa, Domínguez y el ucraniano Vasily Ivanchuk, este último con una actuación atípica si se toma en cuenta las seis ocasiones en las que ha ganado el torneo.

El problema es que esperábamos un campeón de casa, alguien de la isla que ganara el Capablanca, lo cual no ocurre desde hace 5 años, y la forma en la que está en estos momentos Leinier Domínguez nos hacía soñar con un título en manos de un cubano, pero habrá que esperar hasta el próximo año en la edición 50 del Memorial, tal vez allí se nos quite la añoranza por un campeón cubano.