Subsecretaria Jacobson: “Capriles, un buen presidente”
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El canciller de Venezuela, Elias Jaua, anunció este miércoles que decidieron suspender por el momento el canal de comunicación establecido con Washington para mejorar las relaciones bilaterales.
Agregó que así lo orientó el presidente encargado, Nicolás Maduro, y remitió la causa a brutales declaraciones de la subsecretaria de Estado para América Latina, Roberta Jacobson, respecto a su actual proceso electoral.
“Ojalá haya una rectificación y cese la injerencia de Estados Unidos”, dijo el canciller, luego de recordar que su representante para sostener el canal de comunicación era su embajador ante la OEA, Roy Chaderton.
El Nuevo Herald comentó que las misiones diplomáticas de Venezuela y Estados Unidos permanecen sin los respectivos embajadores desde que a fines de 2010 Caracas retiró el beneplácito concedido a Larry Palmer.
Como este periódico de Miami trata de vender su línea editorial parcializada y nada objetiva a través de falsedades y medias verdades, no explica en realidad lo sucedido con Palmer.
Baste señalar que este señor, poco antes de salir a ocupar su cargo diplomático, se atrevió a plantear en el Senado de Washington que las fuerzas armadas venezolanas adolecían de una “baja moral”.
También se aventuró a decir, según amplió este miércoles la edición del Herald, que la Inteligencia cubana “había infiltrado a las fuerzas de seguridad venezolanas”.
Caracas le retiró entonces el beneplácito y Washington, a pesar de todo, solicitó al embajador del país suramericano, Bernardo Álvarez, que cuando terminara sus vacaciones no regresara a Estados Unidos.
Más cercano en el tiempo, últimos días de febrero pasado, la subsecretaria Roberta Jacobson declaró sin rodeos que seguirían respaldando a grupos de la oposición venezolana.
Le respondió el canciller, Elias Jaua, al decir a periodistas que “el imperialismo es un loro viejo que no ha aprendido a hablar, y solo unas dos semanas después la funcionaria se inmiscuyó en las elecciones de Venezuela.
Lo hizo en el periódico español El País (famoso por sus fotografías falsas sobre Hugo Chávez) que la entrevistó y publicó sus criterios el 15 de marzo.
Ella manifestó que los venezolanos merecen unas elecciones “abiertas, justas y transparentes”, en las que nos gustaría la presencia de observadores internacionales, como la OEA y la Unión Europea”.
Continuó, pero lo importante ahora es que sean limpias y transparentes, “será un poco difícil”, pero es lo que los venezolanos y la comunidad internacional deben apoyar.
Luego Roberta Jacobson contribuyó aún más a la previsible debacle electoral de su candidato, Henrique Capriles Radonski, cuando le aseguró a El País que este “podría ser un buen presidente”.
Para tranquilizarla puede recordársele que en las elecciones del pasado 7 de octubre, hasta su candidato declaró públicamente ese día: “No hubo fraude en Venezuela”.
También la contundente afirmación de un ex presidente de Estados Unidos, James Carter, quien manifestó a la prensa: de las 92 elecciones que hemos monitoreado, diría que el proceso electoral en Venezuela “es el mejor del mundo. Tienen un sistema de votación maravilloso”.
Otro dato informativo para Roberta Jacobson. Algo más de un mes después de los comicios del 7 de octubre, Caracas fue elegida por 154 votos para integrar el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, mientras Estados Unidos por 131.
Desde el año 1999 en esa nación suramericana han tenido lugar 17 elecciones y referendos, considerados libres por numerosos observadores y acompañantes internacionales.
En toda esta historia la señora Jacobson olvidó un pequeño detalle, no le habla a la Venezuela de Carlos Andrés Pérez y su banda, lo hace a la de Hugo Chávez, Nicolás Maduro y sus millones de seguidores.
Hombres sumamente tozudos cuando se trata de preservar la independencia y soberanía de su nación, lenguaje, al menos por ahora, un poco difícil de asimilar por la subsecretaria.
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