Lucha cubana: La ruta del mejor deporte individual en 2019

Los gladiadores antillanos tuvieron un mejor performance en 2019 que el boxeo y el atletismo, los otros dos con solidez en la candidatura.

Partimos de la cifra de un centenar de preseas en eventos internacionales, con la guinda del pastel en la corona mundial del grequista Ismael Borrero (67 kg), la plata del también clásico Oscar Pino (130), el quinto título de Juegos Panamericanos de Mijaín López, y la revelación femenina de nombre Milaymis de la Caridad Marín (72-76 kg), reina del orbe tanto entre juveniles como en la categoría sub-23, para coronar un año en el que debe ser la mejor deportista juvenil de nuestra nación.

Han sido 12 meses de arduo trabajo, con un horizonte común de nombre Tokio 2020, para el cual ya las categorías clásicas de 67 y 130 kg están aseguradas, y es muy probable que las restantes cuatro (60-77-87-97) lo consigan en el clasificatorio continental de marzo en Ottawa, Canadá, que otorgará boletos en las divisiones olímpicas a los finalistas. A propósito, Raúl Trujillo, jefe del colectivo técnico del estilo greco, expresó a CubaSí:

«En los Juegos Panamericanos pudimos obtener un palmarés mayor. Tres oros y tres bronces nos satisfacen, pero la competencia se comportó un tanto distante de lo proyectado.

«El Mundial fue un aliciente mayor. De hecho, a Borrero, luego de su segunda corona, lo consideran hoy día uno de los mejores grequistas libra por libra del planeta.

«Tenemos potencialidades para presentar uno de los elencos más fuertes en Tokio y está latente el sueño de reeditar la corona por países. Si entrenamos fuerte y se cumple con el cronograma de preparación, puede concretarse esa aspiración.

«Respecto a los 77 kg, la división de menor empuje, en estos meses pretendemos consolidarla. No estamos lejos de tener una buena representación y es la división con más hombres dentro de la preselección, buscando un hombre que se establezca y sea competitivo entre la élite de uno de los pesos de mayor rivalidad en nuestro estilo».

Por su parte, Julio Mendieta, al frente de la libre masculina, ponderó la ruta crítica competitiva de sus pupilos previo al reto de Lima, igualmente con podio en todas las divisiones (2-1-3).

Sus alumnos tendrán un panorama mucho más convulso en suelo canadiense, pues Estados Unidos, Puerto Rico, Venezuela, e individualidades de Canadá y otras naciones, se antojan como escollos de consideración.

Al respecto, señaló que las mayores opciones de sus pupilos estarían en correspondencia con el hecho de no coincidir con sus homólogos estadounidenses en la misma llave del organigrama.

«Al menos, trataremos de obtener tres boletos en Canadá, y el resto tendría un segundo escenario mucho más complejo en Bulgaria, en mayo, como parte del clasificatorio universal».

No menos rocoso se perfila el panorama de la libre femenina, dueña de una plata y tres bronces en Lima. Sin embargo, solo dos gladiadoras estadounidenses se agenciaron visados a Tokio en la lid del orbe (68 y 76 kg).

«Del resto, decir que será un torneo igual o más fuerte que el de los Juegos Panamericanos. Nuestro equipo es muy joven (20.3 años de edad promedio) y está mentalizado en rendir lo mejor posible, pero el próximo cuatrienio debe ser el de mayores resultados, si siguen su curva lógica de evolución.

«Nos golpea el hecho de que nueve provincias no tienen representación en la preselección nacional, por lo que el seguimiento, luego de la promoción a los equipos nacionales, se dificulta un poco.

«Yusneylys Guzmán (50 kg) está muy bien, enfocada; también está reincorporándose y elevando sus niveles Lienna de la Caridad Montero (57). Yudaris (68) y Milaymis (76) son las otras atletas de perspectivas de clasificación, aunque reiteramos que será en extremo difícil».

Respecto al arbitraje, el país cuenta con cuatro árbitros de categoría internacional; 148 nacionales, incluidas seis féminas, y un total de 234 imparciales en nuestra nación. El mejor internacionalmente fue el avileño Yunior Sosa Naranjo, mientras el guantanamero Indirgalis Martínez resultó el más destacado en el ámbito doméstico.

La lucha verá caer su telón competitivo con la Gala Pedro Val in Memorian el próximo sábado, a partir de las 11:00 a.m., en el coliseo de la Ciudad Deportiva, un homenaje a uno de los mejores entrenadores que ha tenido nuestra Isla.

Además, se rendirá tributo a Gustavo Rollé, considerado el padre de la lucha cubana, fallecido el pasado 27 de noviembre.

Tackles y proyección futura. Siempre buscando la ruta del acierto y con casi todas las papeletas para que la lucha sea el mejor deporte individual del 2019.