Las razone$ de «Teddy»: ¿El osito? ¡No!, el vil gusano
especiales
Mientras el senador anticubano Ted Cruz se enriquece a costa de la NRA los niños mueren masacrados en Texas.
«¿Cómo puedes dormir por las noches?», arremetió Jonathan Fortuna, como un simple usuario de una de las redes sociales, contra el legislador de Texas y, lamentablemente, de origen cubano Ted Cruz, quien trató de tapar la irresponsable política sobre la venta y posesión de armas de fuego, cuando, tras la masacre en un colegio de enseñanza primaria de su estado, en la tranquila localidad de Uvalde, sugirió poner más oficiales armados en las escuelas como solución al problema, y negó que las medidas de control al respecto fueran efectivas.
Ted tenía 311 511 razone$ por las cuales defender el actual mal manejo al respecto, cuando esa cifra traducida en dólares fue el aporte de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por su sigla en inglés) en el 2018, emolumento que ha sido mantenido y aumentado en estos años, en los que no ha abandonado aún sus ínfulas de convertirse en presidente de Estados Unidos y hacer efectiva la primera decisión de su eventual mandato: romper las relaciones que estableció Barack Obama con Cuba, aunque éstas en la era de Trump y ahora de Biden son fantasmagóricas.
El cinismo del parlamentario subió aún más de tono, cuando dio sus «sinceras condolencias» a los familiares de los 19 niños y dos maestros asesinados, y aseguró, que, junto a su esposa, oraba por el alma de los fallecidos.
Echando a un lado las numerosas críticas a sus declaraciones, el aprovechado y desvergonzado político dio como única solución «la aplicación de la ley armada en los campus».
Cruz es también criticado por su oposición al aborto, es decir, siempre ligado a las peores causas, lo cual provocó este comentario del representante demócrata Rubén Gallego:
«A la mierda Ted Cruz, te preocupas por un feto, pero dejarás que maten a nuestros hijos. […] Eres un inútil».
Por su parte, la congresista Alejandría Ocaso-Cortez escribió: «¿No tienes previsto encabezar un evento de la NRA nada menos que en Houston? (en alusión al asesinato de Kennedy) Puedes hacer más que rezar. La fe sin obras está muerta».
El gobernador Greg Abbott, Ted Cruz y el expresidente Donald Trump tienen previsto participar en la reunión de Houston de este viernes, pese a los llamados políticos del demócrata Beto O’Rourke de no asistir a la convención y pedir que esta se lleve a otro sitio.
Es conocido por todos que este senador es el principal receptor de dinero de la NRA, y ha logrado con sus socios de Texas la aprobación de leyes para facilitar la obtención de armas, como el rifle AR-15, utilizado por el joven asesino en su asalto a la escuela primaria.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, descartó la promulgación de restricciones a las armas de fuego, argumentando que los tiradores no seguirían la ley de todos modos. «Preferiría tener ciudadanos respetuosos de la ley armados y capacitados para que puedan responder cuando suceda algo como esto, porque no será la última vez», dijo.
NO HAY PEOR CIEGO…
Como ya publicó y comentó este sitio web, la noche del martes, el presidente Joe Biden se dirigió a la nación después de que ocurriera el tiroteo y pidió acción frente a este tipo de hechos: «No me digas que no podemos tener un impacto en esta carnicería», exclamó.
«¿Cuándo, en el nombre de Dios, vamos a hacer frente al lobby de las armas? ¿Cuándo, en el nombre de Dios, haremos lo que todos sabemos que hay que hacer?», dijo el mandatario a sólo unas horas de regresar de un viaje de cinco días por Asia, donde, subrayo, se reunió con sus principales aliados para conspirar contra China y Rusia.
El expresidente Barack Obama, de quien Biden era su vicepresidente, ya hizo especial hincapié durante su mandato en la necesidad de limitar el acceso a las armas, sobre todo para personas potencialmente peligrosas, con discursos simbólicos como el que pronunció, con lágrimas en los ojos, tras la matanza en la escuela Sandy Hook en el 2012.
Biden, aunque controvertido en otras acciones, es partidario de transformar el «dolor» en «acción» para adoptar medidas que, en su opinión, son «de sentido común», pero tiene que decidirse a enfrentar al gran «lobby» a favor de la tenencia de armas, que protege a la NRA, principalmente en el seno del Partido Republicano y se fortaleció durante el mandato de Trump.
Quienes se oponen a posibles restricciones, como «Teddy», se amparan en la Segunda Enmienda de la Constitución: «Siendo necesaria una milicia bien ordenada para la seguridad de un Estado libre, no se violará el derecho del pueblo a poseer y portar armas». Para poder suprimirla o modificarla, hace falta cumplir con unos términos difíciles de lograr.
Cualquier cambio en el texto aprobado en 1788 -al que se incluyó la Segunda Enmienda en 1789- requiere del apoyo de dos tercios de los miembros de ambas cámaras del Congreso, así como del de tres cuartas partes de los estados del país (38). Existe una segunda opción, por ahora inédita en la historia de Estados Unidos: que dos tercios de los estados convoquen una convención constitucional, como se ha estado haciendo en Chile, con el fin de eliminar o enmendar la Carta Magna pinochetista; y la que pretende realizar Pedro Castillo en Perú, para dar al traste, entre otras cuestiones, con el considerado peor Congreso del mundo, aunque, en verdad, el supuestamente hiperdemocrático estadounidense deja mucho que desear.
Al toro hay que cogerle por las astas, y solo cambiando tal enmienda quizás se puede hallar la salida del laberinto en que se encuentra perdido Estados Unidos.
- Añadir nuevo comentario
- 1822 lecturas
Comentarios
Heem Gondes
Arquero
Arquero
Añadir nuevo comentario