AMLO: Sentando cátedra

No por gusto el Imperio lo tiene en su punto de mira y la derecha local trata de sabotear sus proyectos políticos, económicos y sociales, ambos entes temerosos del ejemplo de Andrés Manuel López Obrador de cómo se debe ejercer una presidencia en beneficio del pueblo mexicano. 

Así, con la utilización nefasta de los principales medios de comunicación, tergiversan cualquier hecho que pueda obstaculizar la gobernanza de un mandatario que se mantiene permanentemente en comunicación con su pueblo.

En este contexto descuellan los diversos llamados para que México sea invadido por el norte por el ejército norteamericano, bajo el pretexto de evitar trágicos hechos como la reciente muerte de migrantes hacinados en Ciudad Juárez, el narcotráfico y la entrada de armamento para los cárteles, todo lo cual, directa o indirectamente, emana desde el peligroso vecino.

Solo falta un año para que AMLO deje de ser presidente, y es mucho lo que ha hecho por su pueblo, incluso tratado de que el sistema electoral sea realmente transparente, algo que ha levantado la política opositora de odio hacia él por quienes desde el poder o escudándose en él roban y privatizan los bienes públicos, aprovechando el poder económico para hacerlo.

Es por eso que esos elementos harán lo que sea necesario para regresar al poder, sin interesarle la democracia en ninguna de sus variantes, porque representan los afanes explotadores de la oligarquía y las transnacionales.

Recuerda el medio californiano La Opinión que “eso ya lo hemos vivido, posiblemente desde 1988, cuando le robaron las elecciones a Cuauhtémoc Cárdenas, y de ahí hasta el 2018; … la elección del 2000 fue la única que ganaron. El problema aquí fue que la gente creía en el cambio, pero nada pudo estar más lejos de la verdad. El triunfo de Vicente Fox simplemente había sido un movimiento de gatopardismo entre el PRI y el PAN”.

Uno de los objetivos principales de estos grupos es controlar el presupuesto a su beneficio, privatizar las industrias públicas, dar concesiones y firmar contratos llenos de corrupción y con deuda para el pueblo.

Prueba de ello es el Fobaproa, la reforma energética, la empresa de Luz y Fuerza donde 40 000 trabajadores quedaron a su suerte, la venta de Mexicana de Aviación, Aeroméxico y la concesión de minas, carreteras, la banca, ferrocarriles, puertos, aeropuertos y la telefonía, entre muchas otras.

Por si fuera poco, estuvieron a punto de hacer quebrar a Petróleos Mexicanos y se han opuesto una y otra vez a los programas sociales del gobierno de AMLO para ayudar a los más vulnerables, especialmente la tercera edad.

En una ocasión el publicista Carlos Alazraki, orgulloso del odio que profesa contra el Presidente mexicano, dijo que la fórmula para ganarle al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), o sea a López Obrador, era con propaganda negativa. Considerado un maestro de la manipulación, subrayó: 

“Y mientras más mentiras des, mejor te va”.

NADA NUEVO

La estrategia para expulsar a Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de la arena política no es nueva. Se promueve por lo menos desde el 2005, cuando a través de un proceso de desafuero se buscó evitar que el político tabasqueño se convirtiera en candidato a la Presidencia.

En la actualidad, empresas y gobiernos extranjeros se han sumado a una “industria del derrocamiento” que desarrolla sus operaciones de forma encubierta, se revela en el documental Las fachadas del golpismo, del Carlos Mendoza Apetite.

El cineasta recuerda en entrevista a Rossia Today, que la injerencia de Estados Unidos es de mucho antes, en forma de "cooperación", "ayuda" o "asistencia".

Históricamente, las agencias estadounidenses han intervenido en la política interna del país a la hora de establecer conexiones con organizaciones o figuras políticas que juegan un papel de opositores al gobierno.

Es el caso de la asociación civil mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), fundada por Claudio X. González Guajardo, hijo de Claudio X. González Aporte, uno de los empresarios más influyentes de México.

Llama la atención que, aunque siempre se ha asumido como una organización sin filiación partidista, cuando era su presidente, González Guajardo se dedicó a organizar reuniones en su propia casa con los dirigentes de los partidos políticos del viejo régimen.

Así, bajo el argumento de que lo suyo era defender una "agenda ciudadana", González Guajardo terminó conformando un alianza legislativa y electoral, 'Va por México', para reconquistar el poder de la mano de la clase política tradicional, la misma que asegura combatir.

Otro de los promotores de esta coalición es Gustavo de Hoyos Walter, expresidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparme), quien aspira a ser candidato presidencial en el 2024.

Y es que, aparentando ser inofensivas, tanto organizaciones no gubernamentales como agencias estadounidenses han estado involucradas en golpes de Estado a lo largo y ancho de América Latina.

En México hubo mucha represión y miles de vidas apagadas: primero lo hicieron con la guerra sucia (1968 a 1980), luego de 1988 al 2000 más de 696 líderes sociales fueron asesinados o desaparecieron, y después vino la guerra contra el narcotráfico durante el gobierno de Felipe Calderón, además de las masacres de Acteal, Cadereyta, Talaya, Iguala, Apatzingán y las fosas comunes encontradas en Guerrero, Coahuila y Durango, entre muchas otras.