El vicecanciller cubano Gerardo Peñalver parte hoy de regreso a su país satisfecho por los resultados de la X Conferencia Italia-América Latina y Caribe, en la cual participó como representante de la Isla.

Al encuentro, organizado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional (Maeci) y el Instituto Ítalo-Latinoamericano (IILA), asistieron 17 titulares del exterior y 10 viceministros, de igual número de países.

'Personas, Planeta y Prosperidad. Futuro de una antigua asociación', fue el tema central de la cita enfocada en la recuperación del devastador impacto de la pandemia de Covid-19, vinculada con los esfuerzos por alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.

En diálogo con Prensa Latina, Peñalver señaló que 'vinimos a reafirmar nuestra disposición de conjunto con los demás países latinoamericanos y caribeños de fortalecer la relación de cooperación construida con Italia' lo cual, en su opinión, se logró.

En ese sentido mencionó la exploración de nuevos frentes de cooperación en ámbitos como desarrollo sostenible, medio ambiente, economía circular y ciudades verdes, los cuales, dijo, 'vienen a actualizar las prioridades de cooperación de Italia con América Latina y el Caribe'.

A la importancia de esos lazos, incluso en el contexto de la Unión Europea, se refirieron en la inauguración del evento el presidente de la República, Sergio Mattarella, en un mensaje, el canciller, Luigi Di Maio, y la viceministra del Maeci, Marina Sereni, quien condujo las deliberaciones.

Podemos decir que Italia se ha convertido en un motor impulsor de los vínculos con América Latina y el Caribe, y especialmente con Cuba, indicó el diplomático antillano quien explicó que durante su estancia sostuvo conversaciones bilaterales con la cancillería, el IILA y ambas cámaras del parlamento.

En el diálogo con el Maeci, la viceministra Marina Sereni manifestó su intención de viajar a La Habana en los próximos meses para participar en la sexta ronda de consultas políticas intercancillerías, manifestó.

Le confirmamos que estamos dispuestos a recibirla cuando su agenda lo permita, precisó Peñalver, quien se entrevistó, además, con la secretaria general del IILA, Antonella Cavallari, quien expresó la disposición de su organización 'a incursionar con Cuba en las nuevas áreas de cooperación'.

Hablamos de la posibilidad de desarrollar proyectos vinculados a esas nuevas temáticas como la economía circular y las ciudades verdes y seguir ampliando los actuales en otras áreas como patrimonio y la agricultura, acotó.

El vicecanciller conversó también con los presidentes de las Comisiones de Asuntos Exteriores del Senador, Vito Petrocelli, y la Cámara de Diputados, Piero Fasino, así como con representantes de la Comunidad San Egidio.

Fue un programa intenso que colmó nuestras expectativas y confirmó que las relaciones entre Italia y Cuba continúan por un curso ascendente, a pesar de las limitaciones provocadas por la pandemia, puntualizó.

Al responder a la pregunta sobre qué espera de Italia y la Unión Europea su país enfrentado al bloqueo de Estados Unidos y la pandemia de Covid-19, Peñalver comentó que aspiramos mantengan una postura firme de condena al bloqueo y participen activamente en nuestros planes de desarrollo económico y social.

Al respecto, destacó el papel desempeñado por Italia en la Unión Europea 'como uno de los motores impulsores a favor de la institucionalización de las relaciones con Cuba, a través del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación, el crecimiento del comercio, el diálogo político, el intercambio cultural y la cooperación'.

Yo creo que Italia tiene, además, la oportunidad de desempeñar un papel relevante como presidente del G20 y copresidente de la COP26 (Conferencia de las Partes del Convenio Marco de la ONU sobre Cambio Climático) para influir favorablemente, en el éxito de las negociaciones sobre cambio climático, expresó.

También, dijo, en el seno del G20 en función del logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, hacia un orden internacional más solidario, más justo, hacia la rectificación de los patrones tradicionales de producción y consumo que impactan muy negativamente en la salud de nuestro planeta y son insostenibles.

Italia tiene en estos momentos la oportunidad de liderar estos procesos, que son de enorme impacto y significación no sólo para Cuba y la Unión Europea, sino para la humanidad en su conjunto, y le deseamos muchos éxitos a la diplomacia italiana en este gran desafío, subrayó.