El sexismo aún abunda en Hollywood a pesar del movimiento #MeToo, según sondeo

Tres años después de que el escándalo del #MeToo sacudiera Hollywood y provocara que decenas de hombres poderosos perdieran sus trabajos, dos tercios de las mujeres que participaron en una encuesta sobre la industria del entretenimiento reportaron continuos episodios de acoso sexual.

La encuesta de la Hollywood Commission publicada el martes también consultó sobre racismo y encontró que menos de la mitad de quienes participaron creen que Hollywood valora la diversidad de origen y puntos de vista.

El sondeo online, lanzado en noviembre de 2019, fue considerado el más grande alguna vez hecho en la industria, y abarca a trabajadores de cine y televisión, comerciales, teatro en vivo, música, noticieros, agencias de talento, relaciones públicas y entornos corporativos.

Casi 10.000 personas respondieron a la encuesta. Aproximadamente el 67 por ciento de las mujeres reportaron haber experimentado acoso de género durante los 12 meses anteriores y el 42 por ciento reportó atención sexual no deseada.

Una persona que participó de forma anónima dijo a la comisión que cuando trabajaba como asistente, el director ejecutivo de la empresa “me dio asignaciones reales para coquetear con otras personas poderosas de la industria para tratar de conseguirle más reuniones a mis jefes”.

La comisión, presidida por la profesora de derecho Anita Hill, dijo que Hollywood había hecho avances en el abordaje de “significativos problemas culturales y ambientales de acoso y discriminación”, pero que se debe hacer más.

La comisión aplaudió los nuevos estándares de diversidad para que los futuros aspirantes al Oscar ganen un premio de la Academia a la mejor película, el compromiso de Netflix de donar 100 millones de dólares a instituciones financieras en manos de personas negras y una iniciativa del actor Michael B. Jordan de incrementar las voces de los negros detrás y frente a la cámara.

Las recomendaciones de la comisión incluyeron limitar los acuerdos de confidencialidad y no divulgación, prohibir el acoso, aumentar las tutorías y la capacitación para ayudar a los empleados a desactivar los incidentes racistas o sexistas.

Hill se convirtió en un icono para muchas mujeres cuando acusó al ahora juez de la Corte Suprema de Justicia Clarence Thomas de acoso sexual en sus audiencias de nominación en 1991. Thomas negó las acusaciones.