Descubren enorme volcán en Marte

Un volcán de 450 kilómetros de diámetro ha pasado inadvertido hasa ahora, aunque se encuentra a simple vista en la región ecuatorial de Marte. 

El hallazgo fue presentado en la edición 55 de la Conferencia de Ciencia Planetaria y Lunar, realizada en Woodlands, Texas, Estados Unidos.

El volcán Noctis, como fue designado provisionalmente, es una estructura geológica remanente de casi 9 mil metros de altura que ha logrado burlar los cientos de fotografías ecuatoriales de Marte debido a que está profundamente erosionado y unido a una estructura de grietas que forman laberintos en el ecuador.

 En otras palabras, el viento e incontables años han borrado su punta y ahora solo queda una base junto con algunos vestigios de la caldera.

La identificación del volcán no fue tarea sencilla. El equipo encargado tomó datos de misiones como la Mariner 9, Viking Orbiter, Mars Global Suveyor, la Mars Reconnaissance Orbiter y la Mars Express, que por sí solas representan los últimos 50 años de exploración marciana. 

A partir de las fotos, realizaron un trazado topográfico de la región ecuatorial en el que comenzaron a identificar rastros sutiles de Noctis.

En un comunicado oficial del Instituto SETI se enumeran mesetas elevadas que forman un arco, suaves laderas, regiones extrañamente cóncavas en el centro y líneas de un fluente sobre la superficie como las principales pistas sobre la existencia del volcán Noctis. 

La fracturación de la estructura, asociada a la erosión térmica y glacial, explicaría su apariencia plana. “Es un volcán antiguo tan profundamente erosionado que se puede caminar, conducir o volar a través de él para examinarlo, tomar muestras y fechar diferentes partes de su interior”, explicó Pascal Lee, autor principal del estudio y científico planetario del SETI.

Los científicos piensan que el vestigio de volcán tiene el potencial de impulsar la comprensión de la historia marciana y su astrobiología. 

Las pistas alrededor de él indican que estuvo activo durante eras y que se formó durante una etapa temprana del planeta. También estiman que pudo albergar hielo, nieve y glaciares en alguna de sus fallas. 

Si estos elementos se unieron con temperatura volcánica, en teoría pudieron haber creado condiciones apropiadas para la generación de microorganismos. “Si ha estado activo durante mucho tiempo, ¿podría la combinación de calor sostenido y agua del hielo haber permitido que el sitio albergara vida?”, cuestionan los autores.