Astro del fútbol de Perú celebra vuelta a las canchas
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Así celebró su vuelta a las canchas el atacante cuya actuación en el campo hace honor a su apellido y que es el ídolo máximo de la afición peruana, que lo acompañó en su vía crucis, que terminó ayer, último día de la suspensión de 14 meses, y más exactamente hoy, con su regreso a las canchas, en Brasil.
De comportamiento disciplinado y ejemplar dentro y fuera del césped -salvo por un temperamento que algunas veces le ha significado expulsiones-, casi nadie en su país duda de su inocencia, que sigue levantando en alto.
El drama vivido por Guerrero se inició cuando, después del partido premundialista del 5 de octubre de 2017 ante Argentina, empatado sin goles, el examen antidopaje dio 'un resultado analítico adverso', es decir un metabolito cuya ingestión está prohibida.
La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) lo suspendió de oficio por 30 días el 3 de noviembre, lo que le impidió jugar por el combinado rojiblanco en el repechaje ante Nueva Zelanda en el que Perú consiguió la clasificación al mundial de Rusia de 2018, sin su capitán y mejor valor.
El mismo mes, una contraprueba, o verificación del primer análisis, encontró el mismo resultado: rastros del metabolito denominado benzoilecgonina y la FIFA escuchó el alegato de Guerrero, solo había tomado, inadvertidamente, infusión de hoja de coca, planta de uso legal y saludable en Perú y Bolivia.
Sin embargo, el 8 de diciembre la FIFA suspendió a Guerrero por un año, sanción que él cuestionó ante el Tribunal de Apelaciones de la FIFA, que redujo el castigo a solo seis meses.
Convencido de su inocencia y deseoso de lograr el sueño de todo futbolista, jugar en el mundial, el jugador llevó el caso al Tribunal Arbitral del Deportes (TAS).
En mayo, en vez de limitarse a ratificar o anular el castigo previo, el TAS lo elevó a más del doble, a 14 meses, alegando que el jugador no había tomado las precauciones necesarias para evitar la ingesta.
Ese mismo mes, el jugador presentó un recurso ante el Tribunal Federal Suizo (TFS), que suspendió la sanción hasta dictar su fallo definitivo, lo que permitió a Guerrero jugar la Copa del Mundo con la selección peruana, en la que esta fue eliminada en la primera fase.
Ya había firmado contrato con el Internacional de Porto Alegre, Brasil, cuando en agosto el TFS dejó sin efecto la suspensión de la sanción y en septiembre los abogados del jugador presentaron otra apelación ante dicho Tribunal, que la desestimó en octubre.
La misma suerte corrió un pedido al TAS para que anule el castigo, al igual que un recurso ante el TSF y en febrero Guerrero volvió a entrenar con el Inter de Porto Alegre, club en el que debutó hoy y anotó un gol.
Para el astro peruano, sin embargo, el tema no está cerrado, pues hizo una demanda al representante legal del Swisshotel de Lima, al que acusa de mentir porque informó falsamente al TAS que no había posibilidad de que Guerrero hubiera tomado por error la infusión de coca.
La semana pasada, el poder judicial peruano aceptó la demanda e inició el proceso.
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