Rusia rechaza acusaciones de EE.UU. sobre tratado de armas nucleares

En cinco años de discusiones sobre el cumplimiento del INF, Washington fue incapaz de presentar al menos una prueba creíble de su presunta violación por nuestro país, declaró el viceministro ruso de Asuntos Exteriores Serguei Riabkov.

Tampoco recibimos respuesta alguna a la iniciativa formulada por nuestro ministro de Defensa, Serguei Shoigu, al jefe del Pentágono, James Mattis, para un análisis de ese asunto a nivel de expertos militares, señaló Riabkov.

Rusia no fabricó ni probó misiles que puedan caer dentro de los parámetros establecidos en el INF, es decir, entre 500 y cinco mil 500 kilómetros, y eso incluye al nuevo misil alado ruso 9M729, el cual posee un alcance de 480 kilómetros, explicó al diario Kommersant.

Sin embargo, Washington señala, sin prueba alguna, que los referidos cohetes alados pueden alcanzar una distancia mayor, si se le suministra el debido combustible, algo que Moscú considera totalmente absurdo.

Rusia acusa a Estados Unidos de violar el acuerdo firmado en 1987. La víspera, el presidente Vladimir Putin recordó que el Pentágono creó los sistemas Aegis, los cuales, basados en buques de combate pueden lanzar misiles de alcance medio.

Sin embargo, denunció Putin, los Aegis en su versión terrestre son emplazados en Rumania y Polonia con el anunciado propósito de ser parte del sistema de defensa antimisil norteamericano en Europa, aunque ello viola directamente lo estipulado en el INF.

Además, Moscú señala que los señuelos empleados por las referidas rampas de lanzamiento para practicar las interceptaciones poseen un alcance prohibido por el mencionado tratado para las armas basadas en tierra.

El Kremlin también rechazó el ultimátum anunciado la semana pasada por el secretario norteamericano de Estado, Michael Pompeo, que da 60 días a Rusia para su supuesto regreso al cumplimiento de la mencionada avenencia.

Rusia denunció que en un primer momento la Casa Blanca informó sobre su salida unilateral del INF, pero ahora busca justificar el abandono del arreglo con la presunta violación de ese tratado por parte de esta nación.