Calderón desvela un letrero en la frontera con EEUU que pide "No más armas"

El ejército mexicano destruyó el jueves en Ciudad Juárez (norte) miles de armas decomisadas a narcotraficantes en 2011, tras lo cual el presidente Felipe Calderón develó un letrero en la frontera con Estados Unidos pidiendo "No more weapons!" ("¡No más armas!").

En las instalaciones del 9º Regimiento de Caballería de Ciudad Juárez, la más violenta de México y fronteriza con Estados Unidos, fueron destruidas en presencia de Calderón e integrantes de su gabinete de seguridad un total de 3.697 armas cortas, 3.091 largas, 456.308 cartuchos, decenas de granadas y lanza cohetes.

Un total de 63.641 armas largas, 44.332 cortas y 10,9 millones de cartuchos han sido incautados en México desde diciembre de 2006, cuando Calderón lanzó una ofensiva militar contra el crimen organizado.

Unos tanques de guerra pasaron el jueves por encima de una alfombra de armas dispuesta para la ceremonia, en una muestra representativa del total de armamento decomisado en 2011, dijo el general brigadier Antonio Monsiváis, subdirector de la dirección de Materiales de Guerra de la Sedena.

Poco después, Calderón se trasladó al puente internacional Córdoba de las Américas, que une Ciudad Juárez con Estados Unidos, donde pidió a los estadounidenses parar la venta libre de armas de alto poder.

"Queridos amigos de Estados Unidos, México necesita su ayuda para detener la terrible violencia que estamos sufriendo y la mejor forma de hacerlo es parando el flujo y la venta de armas a México. ¡No más armas a México!", dijo en inglés Calderón.

El mandatario mexicano hizo un llamamiento al gobierno, al Congreso y a la sociedad estadounidenses. Ayuden a "reducir la violencia en México a través de una legislación que ya estuvo en vigor en Estados Unidos, deteniendo el inhumano tráfico de armas a nuestro país", pidió.

El Congreso de Estados Unidos se negó en 2004 a ratificar la llamada 'Assault Weapons Ban', que prohibía la venta de armas de alto poder.

El arsenal decomisado proviene de "los grupos de la delincuencia organizada y del narcotráfico", que principalmente se abastecen en el extranjero, donde lo intercambian por droga, "aumentando así el tráfico ilegal de armas en nuestro país", añadió Monsiváis. La otra fuente de abastecimiento "es el tráfico ilegal de armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas", añadió.

Entre las destruidas el jueves destacan las armas conocidas como "mata policías", una pistola calibre 50 que tienen capacidad para traspasar el blindaje ligero de algunos vehículos y los chalecos antibalas.

Varios de los revólveres destruidos tenían cachas de plata repujada con imágenes de la virgen de Guadalupe o de plantas de marihuana, entre otros.

Las más de 140.000 armas decomisadas durante su administración -que comenzó en diciembre de 2006- podrían haber armado los ejércitos de El Salvador, Nicaragua y Honduras juntos, subrayó Calderón.

Ciudad Juárez ocupa el primer lugar en número de asesinatos, producto de las pugnas entre el cartel de Juárez y el de Sinaloa -fundado por el capo fugado Joaquín 'El Chapo' Guzmán- y de los operativos para combatirlos.

Entre 2009 y 2010, unos miembros de la Agencia de Alcohol, Tabaco y Armas (ATF, por su nombre en inglés) autorizaron la compra, por parte de sospechosos de tener vínculos con cárteles mexicanos, de unas 2.000 armas de largo calibre para rastrear su uso en un fallido operativo que llamaron 'Rápido y Furioso'.