El que golpeó, ganó

Todos los pronósticos estaban a favor de una amplia victoria con cuatro o cinco victorias del equipo Domadores de Cuba frente a su rival, los Baku Fires de Azerbaiyán, en el último encuentro de la primera etapa de la Serie Mundial de Boxeo efectuado en la ciudad azerbaiyana de Guba, pero los pronósticos no se cumplieron del todo, como en ocasiones suele suceder.

Yosbany Veitía fue el primer púgil cubano en subir al ring, en busca de una victoria ante su rival Khamza Nametov, nada preocupante. Una pelea bastante tranquila, sin mucha resistencia de su oponente para el cubano quien hizo lo que tenía que hacer, tirar golpes y que no le dieran a él.

Luego fue el turno de Robeisy Ramírez ante Magomed Gurbanov, otro rival de poca trayectoria en eventos al máximo nivel, pero que tenía bien claro que ante un rival como el cubano, campeón olímpico en Londres 2012, tenía que salir a ganarle dando golpes. Fue un combate vistoso, con buenos intercambios en los cuales el cubano logró sacar ventaja en la mayoría, otro que tiró más golpes y ganó.

Cumpliendo los pronósticos hasta el momento la escuadra cubana, era el momento de la pelea de Yasnier Toledo, un boxeador de buena trayectoria tanto en olimpiadas como en campeonatos mundiales donde ha sido varias veces medallista; su rival, Gaybatulla Gadzhialiyeb, un hombre también con participación en mundiales y olimpiadas, aunque sin resultados significativos, pero en el cuadrilátero eso no cuenta, cuenta el que más golpes tire.

El azerbaiyano comenzó impetuoso, siempre llevó la iniciativa frente a Toledo, acostumbrado a pelear desde afuera y de riposta, pero ante un hombre como este, decidido a marcar y tirando golpes todo el tiempo hay que pelear y duro, más incluso si se está en desventaja en el marcador, como siempre estuvo el cubano desde el inicio; resultado: primera derrota de Cuba en el enfrentamiento.

Todo estaba listo para el combate más importante y difícil para los Domadores de Cuba Ramón Luis ante Khaybula Musalov, un púgil con ocho triunfos y tres fracasos en las dos últimas ediciones de estas Series Mundiales, un rival de cuidado sin duda alguna.

Desde el inicio salió el púgil azerbaiyano dispuesto a tomar la iniciativa, golpeando más aunque con poca técnica, buscando siempre el combate en la corta distancia tratando de buscar rápida ventaja ante el cubano. Fue una pelea muy cerrada desde el principio, bastante deslucida por la falta de calidad boxística de Musalov, donde el cubano hizo lo que pudo, (o lo que le dejó hacer su rival, constantemente agarrando y metiendo la cabeza), pero no fue suficiente.

Tenía que tirar más y aceptar mejor el combate en la corta distancia, o imponer su ritmo de pelea y no dejarse llevar por el de su contrario; tenía que tirar más que él, cosa que no hizo y al final se impuso el boxeador local, también ayudado por la injusta decisión final de los jueces, en un combate que llegó igualado en el marcador al último asalto, lo cual en la práctica no fue así.

Erislandy Savón se encargó de poner las cosas en su lugar con su victoria ante  Danis Latypov, un combate donde se impuso Savón desde el inicio, (aunque los jueces vieran ganar a Latypov en el primer round); a pesar de esto, Savón logró dominar sin contratiempos a su oponente, haciendo una pelea a su ritmo y buscando siempre pegar primero, porque así se gana en el boxeo, pegando golpes, sino, no se gana.