Destruyendo Ucrania
especiales
El avión de Vietnam Airlines donde viajaba tuvo que desviarse de su ruta hacia Calcuta, y aterrizar en el aeropuerto de Dubái, obligado por la incursión de bombarderos norteamericanos que apoyaban a miles de marines en la invasión al sur de Iraq en 1991.
Preludio de la agresión no provocada contra el país árabe en el 2003, dejó entre otros muchos males la triste herencia de centenares de kilómetros y miles de personas, incluidos soldados estadounidenses, afectados por el uranio empobrecido del armamento utilizado por Estados Unidos a manera de prueba, y posterior muerte de víctimas de cáncer.
Ello no ha sido óbice para que ahora el premier británico de origen indio, un antiGandhi, con el fin de ser más abyecto a Estados Unidos, ha encabezado la más reciente cruzada de envío de armas a Ucrania con la inclusión de proyectiles con uranio empobrecido, tratando de hacer creer que no es causante de los males que se le atribuye, sin tener en cuenta el enorme daño que causaría a la población civil, el ganado y la agricultura de Ucrania.
Voces de hasta sus propios aliados y funcionarios de Naciones Unidas llamaron a evitar el envío de esas armas a Kiev, coincidiendo sin quererlo en la declaración del gobierno ruso de que Occidente lo que busca es la destrucción de Ucrania.
UN POBRE PELIGROSO
El uranio natural se compone de isótopos, principalmente del U-238 con una pequeña proporción del U-235, que es extremadamente radioactivo y fisionable de manera natural. En el proceso de enriquecimiento para la creación de combustible nuclear o bombas nucleares se produce, como subproducto, una gran cantidad de U-238 empobrecido (es decir, con mucho menos U-235). El uranio empobrecido contiene solo alrededor de un 0,3% de U-235, por lo que las armas con este contenido no están prohibidas.
El uranio empobrecido es utilizado en proyectiles y bombas porque ya de por sí es un metal extremadamente denso, 1,7 veces más que el plomo, lo que le permite ser utilizado cuando se requiere una masa grande en un volumen pequeño. Así, proyectiles con esta sustancia pueden penetrar fácilmente tanques y vehículos blindados.
De acuerdo con la información proporcionada por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el principal peligro potencial asociado a las armas de este tipo es la inhalación de los aerosoles que se generan cuando las municiones impactan contra un objetivo blindado. En este sentido, la mayor dosis de estas vaporizaciones podría alcanzar a las personas que se encuentren cerca del objetivo en el momento del impacto o que luego lo examinen.
Al mismo tiempo, el OIEA indica que el elemento podría afectar a quienes visiten o vivan en las zonas donde se haya utilizado, ya que el material rociado se asienta en el suelo y la gente inhalaría las partículas de uranio empobrecido que emanan. Otra posible vía de exposición es la ingestión: los agricultores que trabajen en una zona en la que se hayan disparado tales municiones podrían ingerir pequeñas cantidades de tierra inadvertidamente, mientras que los niños podrían hacerlo de forma deliberada. Además, las vías de exposición a largo plazo incluyen el consumo de uranio empobrecido en el agua potable y la cadena alimentaria por la migración desde el suelo o la deposición directa sobre la vegetación.
Se señala que grandes cantidades de municiones con uranio empobrecido disparadas desde un avión no alcanzan el objetivo previsto, por lo que la mayoría quedan enterradas a distintas profundidades y en los edificios. Algunas de ellas podrían quedar tiradas en el suelo cerca del objetivo y las personas que las encuentren se expondrían a la radiación externa que emite el uranio empobrecido.
BLINKEN, MENTIROSO
El anuncio británico del envío de este tipo de munición a Kiev, se efectúa tras la proposición china de paz acerca del conflicto, tras lo cual el secretario norteamericano de Estado, Anthony Blinken, calificó de engaño la iniciativa de Beijing que iba siendo acogida favorablemente por algunas naciones.
Esta decisión de escalar el conflicto está vinculada a la visita del presidente de China, Xi Jinping, a Moscú, en la que el líder asiático exhibió su contundente apoyo a su par ruso, Vladímir Putin, pero también al hecho de que Ucrania está perdiendo en el campo de batalla, pese al masivo apoyo financiero y mediático de Occidente, que busca suministrarle armas todavía más letales, pese a lo irresponsable que es una decisión de este tipo.
Como Rusia tiene en este momento un mejor posicionamiento en el conflicto bélico que Ucrania, evidentemente hay descontento de Occidente, porque las cosas no le están yendo bien, y toma decisiones peligrosas.
Es preocupante que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) vuelva a emplear este tipo de armamento en un conflicto internacional (también lo había hecho en Yugoslavia), pero ello obedece a la nueva doctrina nuclear de Estados Unidos bajo el gobierno de Joe Biden, que permite la utilización de este tipo de arma en combate para alcanzar objetivos específicos.
Sin dudas, su uso por la OTAN envía la misma señal de que se pueden usar armas nucleares, sean tácticas o no, lo que pone al mundo más cerca de una hecatombe nuclear, y esta vez, sin parar mientes, pasando primero por la destrucción de Ucrania.
Añadir nuevo comentario