Suman 91 los establecimientos del Estado donde se realizan las ventas a plazos

En 91 establecimientos distribuidos en la mayoría de los territorios del país se realizan actualmente las ventas a plazos de artículos duraderos como muebles, colchones y bicicletas, y cuyo valor supere los dos mil 500 pesos, informó una fuente del Ministerio de Comercio Interior (Mincin).

A excepción de La Habana y del Municipio Especial Isla de la Juventud, donde aún no ha comenzado a aplicarse esta nueva modalidad normada en la Resolución 98/2021, del Mincin, en las restantes provincias cada día tiene mayor acogida, aun cuando los altos precios de determinados productos ha estado entre las preocupaciones o inquietudes de potenciales clientes.

Consultado por la Agencia Cubana de Noticias, David Pena Valino, especialista principal del Grupo de Desarrollo de la Dirección de Ventas Minoristas del mencionado organismo, recordó que la venta a plazos, iniciada en septiembre, se realiza por el sistema de oferta y demanda en una tienda habilitada con ese fin.

Sus suministradores son los Trabajadores por Cuenta Propia, las Cooperativas no Agropecuarias, las Mipymes, el Fondo de Bienes Culturales y las empresas mayoristas Universales pertenecientes al Grupo de Industriales, del Comercio Interior, subrayó.

Señaló que se aspira a contar al menos con un establecimiento por municipio, donde las personas puedan pagar el artículo en dinero efectivo o por vía electrónica, modalidad que ya se aplica en 53 unidades que disponen del Código QR, es decir, mediante aplicaciones en los teléfonos móviles como Transfermóvil, EnZona o por el servicio de POS.

Lo ofertado hasta ahora rebasa los 16 millones de pesos y sobresalen las provincias de Matanzas y Villa Clara, puntualizó el entrevistado, además de destacar la buena acogida que entre los estudiantes de los centros de la educación superior escogidos ha tenido poder adquirir una bicicleta abonando a plazos el monto monetario de su costo.

Pena Valino mencionó en ese sentido la Universidad Central de Las Villas Marta Abreu, y las de Ciego de Ávila, Cienfuegos, Mayabeque y Tecnológica José Antonio Echeverría (Cujae), en la capital.

Precisó que el cliente debe ser ciudadano cubano con domicilio permanente en el país, residir en la provincia donde solicite la venta, tener más de 18 años de edad, capacidad legal y de pago para concertar las obligaciones; contar con ingresos demostrables, fijos y regulares avalados; y haber honrado o estar honrando otras deudas contraídas bajo esta modalidad de comercialización minorista.

Deberá presentar el carné de identidad, certificación del centro de trabajo por el salario devengado; Declaración Jurada de impuestos sobre los ingresos personales (en el caso de los trabajadores por cuenta propia), y certificación de los ingresos por la Dirección de Trabajo o filial del Instituto Nacional de Seguridad Social (los pensionados o beneficiados de la Asistencia Social.

Funciona en Camagüey primera tienda para venta minorista a plazosDe acuerdo con lo establecido, los estudiantes en centros que reciben asignaciones de artículo, con pago a plazos, presentan los datos personales y compromiso de la persona que los asiste para el pago y los de un fiador, incluyendo su capacidad de pago.

Cuando el cliente determine en la tienda el producto que quiere comprar se le hace un contrato –con los documentos requeridos-, para cuya verificación se dispone de hasta 10 días hábiles, se firma un compromiso de tramitación de la solicitud y se informa de su resultado, explicó el especialista principal del Grupo de Desarrollo de la Dirección de Ventas Minoristas del Mincin.

Acotó que en el contrato se establece el importe de la compra, tasa de recargo, forma y plazos de pago, cuotas y consecuencias del incumplimiento, así como la solución de conflictos, obligaciones, términos y condiciones, de ambas partes, además de insistir que la tasa máxima de interés no puede superar el 2,5% sobre el importe del artículo.

Pena Valino puntualizó que una vez verificada toda la documentación y firmado el contrato se procede al pago inicial de no menos del 20% del precio de venta del artículo,ya sea por la vía electrónica o en efectivo, y lo restante en los plazos pactados a abonar, que tienen como término un año.

Tras la compra se recibe un vale de venta y el certificado de garantía, y una vez que se hayan pagado todos los plazos pactados, es decir, que se haya abonado la totalidad del importe, se otorga el certificado de propiedad en caso que corresponda.

De incumplirse los términos contractuales establecidos y de una posible renegociación, el establecimiento está facultado para retirar el bien sin devolución del efectivo que ya se haya abonado; pero de no existir aquel y no asumir responsabilidad el fiador se acude a la vía judicial, de conformidad con lo establecido en la legislación vigente, concluyó el especialista.