Pelosi: Juicio político a Trump protege la Constitución de EE.UU.

“Este impeachment [juicio político] contra [Donald] Trump se fundamenta en la protección de nuestra Constitución y la preservación de nuestra república. Insistiremos en la integridad y la equidad de los procedimientos, reconociendo el papel que juega el Senado en todo esto”, ha subrayado este jueves la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, en su conferencia de prensa semanal en el Capitolio, en Washington D.C., la capital.

Pelosi ha agregado que el expresidente “debe ser juzgado y condenado”, porque así se garantizará que los futuros mandatarios del país no piensen que está bien “incitar a una insurrección ilegal”, o “detener la determinación sobre quién será el próximo presidente” del país.   

Conforme a la líder demócrata, Trump “puso bajo grave peligro” la seguridad de Estados Unidos y amenazó la “integridad del sistema democrático”, además de interferir con la transición pacífica del poder y “traicionar” la confianza del pueblo.

Pelosi ha enfatizado también que el Senado de Estados Unidos realizará un juicio político “justo y respetuoso” contra el exmandatario, que tendrá lugar en la segunda semana de febrero

Trump será el primer presidente en la historia de EE.UU. en enfrentar dos juicios políticos. En el primero, hace menos de 13 meses, la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, acusó al magnate inmobiliario de abuso de poder y de obstrucción a las investigaciones del Congreso, en el caso de la trama ucraniana. No obstante, a posteriori fue absuelto por el Senado, de mayoría republicana.

A pocos días de dejar el cargo, la arenga de Trump a sus simpatizantes para que marcharan al Capitolio, cuando los legisladores se aprestaban a certificar el triunfo del demócrata Joe Biden en las elecciones del pasado 3 de noviembre, le valió la condena nacional e internacional e innumerables peticiones a un nuevo impeachment.

La decisión de la Cámara Baja de iniciar un juicio político contra el exmandatario se discutirá en el Senado, donde los demócratas necesitan dos tercios de los votos para emprender la tarea.