El portavoz presidencial, Nabil Abu Rudeina, estimó que ahora el Consejo de Seguridad debería detener de inmediato la agresión contra “nuestro pueblo y los crímenes de genocidio” tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania.

El aislamiento de los gobiernos de Israel y Estados Unidos a nivel internacional aumenta, afirmó.

Según Abu Rudeina, esa nación “debería haber sido incluida en esta lista hace mucho tiempo”.

En similar sentido se pronunció el presidente del Consejo Nacional Palestino (Parlamento), Rawhi Fattouh, quien estimó que la medida anunciada ayer por la ONU es “una nueva acusación añadida al historial negro de la entidad de ocupación fascista”.

Acusó a las autoridades de esa nación de ejecutar una limpieza étnica en los territorios palestinos.

Fattouh describió la decisión del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, como valiente, audaz y justa, a pesar de la cantidad de presiones y amenazas en su contra.

También el asesor presidencial palestino y excanciller, Riyad Al-Maliki, saludó la medida.

Guterres “decidió superar las presiones y chantajes a los que era sometido anualmente, cada vez que se acercaba la fecha del informe anual de los países y organizaciones que arrestan y matan a niños en conflictos”, subrayó.

En la lista también fueron incluidos el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) y la Yihad Islámica palestina.