Los cuerpos de personas que sucumbieron al nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, en la ciudad de Nueva York, todavía siguen almacenados en remolques refrigerados, convertidos en morgues improvisadas, desde el apogeo de la pandemia, hace más de un año, informó el viernes la cadena estadounidense CNN.

El medio, citando a fuentes de la Oficina del Médico Forense de Nueva York, señaló que al menos 750 cuerpos, de los cuales no todos son víctimas del letal virus, están en camiones estacionados en el Terminal Marina de South Brooklyn, un suburbio portuario. Esto, para CNN, es un triste recordatorio de cómo colapsaron los hospitales, las morgues y las funerarias de la ciudad la primavera (boreal) pasada cuando estalló la pandemia.

A principios de abril de 2020, se informaron de más de 800 muertes por coronavirus en un solo día en la ciudad de Nueva York. Durante la primera semana de ese mes, se registró un promedio diario de 566 muertes en la ciudad, conforme a los registros de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de EE.UU.

Respecto a los camiones con cadáveres, Mark Desire, portavoz de la Oficina del Médico Forense, dijo a la CNN que la política del almacenamiento de cuerpos en remolques refrigerados se estableció para garantizar que las familiares de las victimas pudieran despedirse de sus seres queridos y darles una sepultura digna y en condiciones que evitasen un contagio masivo.

Desire subrayó que la morgue temporal en la zona portuaria de Brooklyn se había establecido para proporcionar un almacenamiento a largo plazo para los difuntos durante los picos de la pandemia que han ido colapsando la industria funeraria en sus diversas fases.

La última vez que Nueva York recurrió a medidas tan drásticas fue después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, cuando la oficina del médico forense tuvo que identificar decenas de miles de partes del cuerpo de las 2753 personas muertas en el colapso de las torres gemelas de World Trade Center.

Los últimos datos ofrecidos por el portal worldometers.info revelan que al menos 33 418 836 estadounidenses se han infectado por la COVID-19 hasta el viernes, de los cuales 594 911 han fallecido.