EE.UU. marca un nuevo récord de muertes diarias por coronavirus
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La pandemia vuelve a asomar la cabeza en la primera potencia mundial, donde la inoculación alcanza solo al 60% de la población y con el populoso estado de la Florida rompiendo sus propios índices de contagios diarios.
Estados Unidos, el país más afectado por el coronavirus, registró este jueves otro alarmante récord de muertes diarias, mientras aumentan las hospitalizaciones pediátricas y la temida variante Delta sigue dañando gravemente a una población todavía reticente a vacunarse, para lamento del presidente Joe Biden.
La pandemia vuelve a asomar la cabeza en la primera potencia mundial, donde la inoculación alcanza solo al 60% de la población y con el populoso estado de la Florida rompiendo sus propios índices de contagios diarios.
Según datos oficiales, alrededor de 100 mil personas en el país se enferman diariamente de Covid-19, cifra integrada casi exclusivamente por los no inmunizados con alguna de las varias inyecciones que tienen a su entera disposición.
Esta cifra representa un nivel que no se observaba desde el 30 de enero, en plena ola de casos en invierno.
También están aumentando las hospitalizaciones pediátricas: 2.100, lo cual supera por primera vez las 2.000 desde agosto de 2020.
En las últimas 24 horas se presentaron 820 decesos, el máximo en un solo día desde el inicio del flagelo en marzo de 2020.
Los expertos destacan que el incremento de infecciones está relacionado con la irrupción de la cepa Delta, la más contagiosa de las conocidas.
Ante el avance de los casos, los hospitales están entrando en la desesperación al verse bajo presión por la probable falta de camas de terapia intensiva.
La cifra de casos más alta se registra en el sur del país, donde cada estado tiene la media más alta a nivel nacional.
El récord lo tiene la Florida, con más de 17.000 personas hospitalizadas, cifra que se triplicó en el último mes, seguido por Texas, con más de 14.000.
Ambos estados están conducidos por gobernadores republicanos, quienes se han manifestado en contra del uso obligatorio de tapabocas y vacunas, inclusive en las escuelas, donde acaban de comenzar las clases.
La esperanza de Biden es que la reciente autorización definitiva del fármacoPfizer contribuya a disipar las dudas entre los más escépticos a inyectarse y prevé lanzar una campaña en septiembre para la aplicación de una tercera dosis, lo cual causó renovado repudio en la Organización Mundial de la Salud, que pugna vanamente por un equitativo reparto de inmunizantes.
El aumento de casos está generando pánico entre las autoridades sanitarias.
“Los números de casos son ahora mucho peores que de agosto pasado, cuando no teníamos la vacuna”, expresó Paul Offit, miembro de la comisión de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) y citado por la agencia de noticias ANSA.
Estados Unidos suma 38,4 millones de contagios y 633.000 muertes, según el último parte oficial.
Proyectan 100.000 muertes más por COVID-19 en EEUU
(AP) Las proyecciones indican que Estados Unidos va a registrar casi 100.000 muertes más por COVID-19 entre ahora y el 1 de diciembre, de acuerdo con el modelo de pronósticos más seguido en el país. Pero los expertos de salud dicen que ese número se podría reducir a la mitad si casi todo el mundo usara mascarillas en lugares públicos.
Básicamente, lo que depare el coronavirus para el otoño depende de la conducta humana.
“La conducta realmente va a determinar si, cuando y hasta qué punto baja la ola actual”, dijo Lauren Ancel Meyers, directora del COVID-19 Modeling Consortium de la Universidad de Texas. “No podemos frenar la (variante) delta abruptamente, pero podemos cambiar nuestra conducta de la noche a la mañana”.
Eso significa volver al uso de máscaras, limitar las aglomeraciones sociales, quedarse en casa cuando uno está enfermo y vacunarse. “Esas cosas podemos controlarlas”, dijo Meyers.
Estados Unidos está en medio de una cuarta ola de infecciones este verano, impulsada por la variante delta, sumamente contagiosa, que ha acusado un gran incremento de las infecciones, las hospitalizaciones y las muertes, abrumado centros médicos y borrado meses de progresos contra el virus.
Las muertes andan en más de 1.100 por día como promedio, regresando a los niveles de mediados de marzo. Un modelo influyente, de la Universidad de Washington, proyecta unas 98.000 muertes adicionales para el inicio de diciembre, para un total de casi 730.000.
La proyección dice que las muertes aumentarán a 1.400 diarias para septiembre, tras lo cual declinarán lentamente.
Pero el modelo dice también que muchas de esas muertes se pueden evitar si los estadounidenses cambian su conducta.
“Podemos salvar a 50.000 simplemente usando mascarillas. Así de importantes son las conductas”, dijo Ali Mokdad, profesor de ciencias de índices de salud en la Universidad de Washington en Seattle que está participa en la elaboración de las proyecciones.
Ya hay indicios de que los estadounidenses se están tomando las amenazas más seriamente.
En medio de la alarma por la variante delta en las últimas semanas, se redujo la baja de la demanda por vacunas para el coronavirus. El número de inyecciones por día ha subido alrededor de 80% en el último mes, hasta un promedio de 900.000.
El coordinador del esfuerzo de la Casa Blanca contra el COVID-19, Jeff Zients, dijo el martes que en Luisiana, Alabama, Arkansas y Mississippi, “más personas recibieron sus primeras dosis en el último mes que en los dos meses previos combinados”.
Asimismo, millones de estudiantes tienen ahora la obligación de usar mascarillas. Un número creciente de empresas están demandando que sus empleados se vacunen, luego que el gobierno federal le dio aprobación plena a la vacuna de Pfizer.
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