De la mano del fotógrafo, Roberto Chile, vuelve a la palestra el proyecto Donde anida la poesía, esta vez corpóreo, en forma de libro. En su interior aparecen fotografías junto a la lírica de reconocidos autores cubanos que aceptaron la invitación y el reto de acompañar la iniciativa del también documentalista.

La Biblioteca Nacional de Cuba José Martí fue sede para la presentación del volumen que reúne instantáneas de Chile, pero que hoy no son el centro de una muestra sino un elemento más, aunque imprescindible, de la obra en su conjunto que conformó junto a los poetas presentes. En este caso, la fotografía funciona como vehículo, apoyo e inspiración, y constituyó el principal desafío para los bardos, quienes fueron convocados a sumarse e innovar, dar rienda suelta a su talento según les provocara el incentivo propuesto.

Foto: Prensa Latina

Sobre la selección de imágenes, el prologuista Rafael Acosta de Arriba, asegura que “se corresponde con algunas de las vertientes de su trabajo fotográfico —de Chile—, que van desde lo conceptual o experimental, hasta lo puramente documental”, pero, sin dudas, se trata de un grupo de fotos que retratan un fragmento de la Cuba contemporánea, que al mismo tiempo es una suerte de crónica social recurrente en el portafolio de su autor, quien nos tiene acostumbrados a encontrar arte en lo cotidiano, con buen manejo de la luz y el color, con especial atención a los detalles.

Un minuto de silencio (a Tina Modotti).

La parte visual de este proyecto también es un reflejo del crecimiento de su artífice. En cada una de sus creaciones es evidente su evolución, su búsqueda constante de la excelencia, acumulada durante muchos años de desandar por sus motivaciones personales, y experimentar con estilos y modos distintos.

Donde anida la poesía responde a una idea de Chile con un propósito noble, que busca confrontar, dialogar a partir ambas formas poéticas, la fotografiada y la escrita. En su nueva entrega confluyen estas dos manifestaciones del arte de manera armoniosa, una, soporte imprescindible de la otra. El libro ofrece al lector textos inéditos de casi todos los poetas que lo integran, quienes, basados en las fotografías le agregaron valor y significado según sus propias percepciones, tan libres como sus fantasías.

De acuerdo con Chile, se trata de “un acto de amor espontáneo y sincero” que surgió al azar, y poco a poco tomó forma, en principio, por su interés en la imagen, y también por la fascinación que siente por la poesía. Ejemplo de ello es el pasaje que da inicio, Cauces, escrito por el fotógrafo hace 32 años.

La estrella de Fidel.

Chile es respetuoso en su trabajo, a través de sus estampas nos relata nuestra propia cultura, costumbres y realidades. La mayoría de las imágenes en cuestión son de series como Guanabacoa, SOMOS, Fidel es Fidel y Convergencias. Algunas de ellas no nos serán ajenas sino más que conocidas, familiares, y eso tiene que ver con sus inquietudes, incluso sus sentimientos.

Ante tal narración artística los poetas se recrearon, dejaron volar la imaginación y concibieron obras de valor y belleza, a veces profundas, enigmáticas, incluso simpáticas, como es el caso de Fábula de la rosa y la piedra, de Alexis Díaz-Pimienta, sobre la fotografía titulada Duelo:

(…)
—Piedra, cásate conmigo.
—No hacemos buena pareja.
—Quién lo ha dicho. —Deja, Deja.
—Piedra, en serio te lo digo.
—¿Y si me caso contigo
dónde vamos a vivir?
—Primero debes decir
Que sí, que nos casaremos.
—Hecho. —Nos alquilaremos
un cuarto en el porvenir.
(…)

Escritores de renombre como Miguel Barnet, Nancy Morejón, Alex Pausides, Marilyn Bobes, y Basilia Papastamatiú, entre muchos más, dejaron su impronta junto a las fotografías de Chile que inspiran temas diversos. Bajo Ediciones Bachiller Donde anida la poesía hace que todos concurran. Las imágenes fueron escogidas sin orden con el único ánimo de ofrecer miradas disímiles. Como trabalenguas, antes fue el fotógrafo, luego los poetas; cada quien plasmó; uno, su interpretación de un instante, y, otros, sus deducciones de un fragmento captado por un lente. Ahora le toca al público ser observador, asumir y apreciar el arte en su conjunto, o por separado, es libre de elegir.

Yoruba soy.