Dejamos un 2023 que obliga a reimpulsar la economía cubana

Por el comportamiento de la economía en los últimos trimestres ya muchos cubanos suponíamos que el 2023 cerraría con un decrecimiento del Producto Interno Bruto, y así se confirmó con el anuncio oficial de que habría una contracción de entre un uno y un dos por ciento al cierre del año.

Tal cual informó en el reciente Segundo Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular Alejandro Gil Fernández, vice primer ministro y titular del Ministerio de  Economía y Planificación (MEP), debido a las limitaciones en la disponibilidad de divisas y combustibles no resulta posible alcanzar el crecimiento proyectado del 3 % del PIB a precios constantes.

Ha sido un año en el que no se concretaron con creces los frutos de diversas medidas y programas por razones múltiples, empezando por el bloqueo estadounidense y la inclusión de la Isla en la lista de Estados promotores del terrorismo, acompañados de la elevación de los precios, los conflictos internacionales y las deficiencias internas.

En lo que quizás haya sido el año más difícil y complejo de la Revolución, todo eso y su impacto en la insuficiente captación de divisas, en los desequilibrios macroeconómicos, en la persistencia de un gran déficit fiscal y de una creciente inflación, se resintió en las carencias de alimentos, medicamentos y de otros bienes y servicios destinados a la población.

Pero no se puede obviar cómo con escasos recursos financieros el Estado procuró garantizar los productos de la canasta familiar normada- cuyo costo supera anualmente los mil 600 millones de dólares-, la generación de electricidad, los combustibles y los artículos de aseo, entre otros. 

Desafortunadamente hubo incumplimientos de la producción nacional, incluida la agroindustrial y en particular la de alimentos, por lo cual no se alcanzaron los niveles necesarios que dieran respuesta a las demandas de la población y del país.

Según el titular del MEP se estima que el 2023 concluya con una inflación de un 30%, que se acumula de años anteriores, en tanto la elevación sostenida de los precios afectó la capacidad de compra de los salarios y pensiones, uno de los principales desafíos y problemas sin resolver.

En el empleo se espera una disminución del 4% de los ocupados en la economía, por lo cual se implementarán medidas para detener esta tendencia, algunas de ellas anunciadas ante el Parlamento por Manuel Marrero Cruz, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Primer ministro.

Por otra parte, se agravó el  desequilibrio histórico de la balanza comercial, hubo una caída de los ingresos por exportaciones sin que disminuyeran sensiblemente las importaciones y tampoco se logró el incremento y diversificación de las exportaciones de bienes y servicios.

Al cierre del 2023 existen 343 negocios activos con empresarios de 40 países, y con presencia en todas las provincias y en el Municipio Especial Isla de la Juventud, según Ana Teresita González Fraga, vice ministra primera de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera.

El año concluyó con nueve mil 652 micro, pequeñas y medianas empresas privadas, 464 cooperativas no agropecuarias y más de 576 mil trabajadores por cuenta propia, y aunque la decisión de aprobar las Mipymes fue correcta, que muchas se centraran básicamente en la comercialización de productos listos para la venta, mediante la retención de efectivo y su adquisición en el mercado legal de divisas, fueron de las distorsiones que habrá que rectificar.

Con vistas a ello a partir de enero de 2024 serán los gobiernos municipales los que fomenten y aprueben más actores económicos y no desde el Ministerio de Economía y Planificación, tal como ocurría, a la vez que se actualizará las actividades a realizar por las nuevas formas de gestión no estatal.

Asimismo con la entrega de recursos se beneficiaron 66 mil 626 familias en situación de vulnerabilidad, y como parte de la política de no dejar a nadie desamparado unas 59 mil 687 personas reciben el servicio del Sistema de Atención a la Familia. No obstante estos indicadores no se avanzó en el principio de subsidiar a las personas que lo requieran y no a productos.

Desde julio último el país se trazó impulsar el proceso de bancarización de las transacciones, el cual junto a la calidad de los servicios bancarios aún no ha tenido los resultados esperados dirigidos a recoger la mayor cantidad de efectivo en circulación, lograr un amplio uso de los canales de pago electrónico y satisfacción en los clientes.

Al decir del Primer ministro se buscan soluciones propias, a partir de que se ha laborado todo el año en una serie de análisis y propuestas, consultas a especialistas, con la seguridad de que es necesario un grupo de decisiones y sistemas de trabajo, aun cuando sabemos que el escenario 2024 tendrá complejidad, pero experiencia en tiempo de crisis hay, subrayó ante los diputados.

Al respecto Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, señaló que en una suerte de tormenta perfecta, confluyen con mucha frecuencia el deseo de superar la situación adversa, la correlación entre las variables económicas, el compromiso por preservar las conquistas sociales y la muy poca y a veces nula disponibilidad de divisas.

Todo ello, dijo ante el Parlamento, ha sido caldo de cultivo para la toma de decisiones no integrales, que provocan lógicas incomprensiones e impactos negativos por su aplicación en condiciones desfavorables, lo que muchos consideran causa de todos los problemas, sin ser realmente las únicas y ni siquiera las más determinantes.

Precisamente hay una clara conciencia de las debilidades e insuficiencias propias, cuyo seguimiento y solución están recogidos en las Proyecciones de Gobierno destinadas a corregir distorsiones y reimpulsar la economía durante el 2024.