DE LA COCINA: Jengibre, especia poderosa (+recetas)

El jengibre es una raíz que se utiliza como condimento desde hace mucho tiempo. De hecho, ya en la Antigüedad se empleaba tanto para las comidas como con fines terapéuticos. Tiene un sabor peculiar e intenso que puede variar de picante, y a la vez, fresco. En la cocina se emplea en tantas recetas dulces como saladas, y es famoso por ser protagonista en la cocina oriental. Ese toque exótico y versátil hace que sea un ingrediente muy común en la actualidad.

Además, destacan sus propiedades curativas. De acuerdo con varias fuentes es bueno consumir jengibre cuando tenemos infección e inflamación. Dicen que puede ayudar a mejorar las náuseas, la digestión, el dolor menstrual, incluso ante síntomas más complejos relacionados con cardiopatías y las funciones neurológica, circulatoria y respiratoria. Asimismo, lo sugieren para disminuir los niveles de colesterol, perder peso, y fortalecer el sistema inmune, sobre todo en caso de resfriado y alergias.

Sin embargo, si usted padece alguna condición crónica, recuerde que, aunque sea un producto natural el personal médico es el único facultado para hacerle indicaciones.

Volvamos a la cocina. El jengibre es una especia muy aromática y potente, ideal para aderezar platos. Perfectamente se puede usar su versión deshidratada y envasada en forma de polvo o láminas, y también dicen que se encuentra confitado o en esencia, pero me gusta mejor recomendarla natural.

Afortunadamente es una raíz que podremos encontrar en mercados, con vendedores ambulantes, y también podremos cultivarla en casa sin mucho protocolo, pues se da bastante bien incluso en una maceta sin demasiada atención, pues no es exigente. Basta con cortar trozos de una raíz que consigamos, plantarla casi superficial, y mantener hidratado el sustrato, no seco, tampoco ahogado.  

Y si logramos cosecha abundante, podremos secarla en casa de manera artesanal y conservarla en lugar fresco. En mi caso lo congelo en porciones para luego preparar té, y en el resto de las elaboraciones prefiero usarla totalmente fresca, pero esto también es a elección.

Fotografía tomada de https://www.eltiempo.com

Como el gusto es tan diverso, hoy en CubaSí les ofrecemos algunas recetas que usted podrá adoptar y variar según su gusto. Recuerde que cocinar es un acto intuitivo, y también es válido atreverse y explorar nuevos sabores, aunque parezcan contrastados —así me ha sucedido con el sushi, un tipo de cocina asiática, milenaria y de moda, en la que se combinan ingredientes distintos que en su conjunto crean una explosión de sabor única— eso sí, si es su primera vez con el jengibre, hágalo con moderación porque puede parecerle fuerte al paladar.

En libros de cocina se presenta con pescados y mariscos, pero vivimos en Cuba, así que nos iremos por otras áreas. Y si usted consigue uno de esos manjares, perfecto, lo adereza con jengibre o lo agrega casi al final de su cocción, el sabor será exquisito. Las propuestas de hoy son las siguientes, recuerde que no de una experta chef sino de una hábil glotona que escribe sus propias experiencias:

Bebida
Me gusta agregarle un trozo de jengibre cortado en tiras a cualquier té, esto le aporta un sabor un poco picoso y muy interesante. Si no tengo té de sobre infusiono hojas de menta, o manzanilla, o tilo, la que aparezca, o lo hago solo de jengibre y siento que calentito me cae muy bien en el estómago, no obstante, en verano me gusta enfriarlo. Otra variante —de mis preferidas— es agregarle un pedacito a un jugo que me gusta beber muy frío y que varía según la fruta que encuentre, pero ideal para mí es combinar piña, mango, apio, naranja y jengibre. Se bate y cuela todo, si se usa bastante fruta no necesita ni azúcar. Pero claro, todo dependerá de lo que se encuentre, esta es solo una idea.

Pudín
A la receta básica de pudín, que es la mezcla de pan, leche, huevo y azúcar —según la proporción que usted prefiera— me gusta ponerle jengibre finamente picado o rallado. Como es costumbre, esto se cocina con el método de baño de María en molde acaramelado hasta que obtenga la consistencia deseada. Para subir el nivel, siempre que puedo me gusta agregarle coco o frutos secos, en nuestro caso será más fácil maní, y para mi gusto es mejor deshacerlos un poco. También marida muy bien con ralladura de cáscara de limón, solo la parte verde o amarilla, nunca la blanca. Esta idea se aplica estupendamente a cualquier receta de torta o panetela, como usted le diga.

Galletas
Existen muchas variantes. Puede combinar harina con avena o solo harina hasta conseguir tres tazas, las mezcla con una de azúcar, y una y media de aceite o manteca. Le agrega una cucharada de polvo de hornear, una pizca de sal, más jengibre finamente picado, o rallado (no pongo cantidad porque es a gusto de cada quien y depende de qué tanto le guste su sabor, puede probar antes de hornearlas para corregir). Esta es, digamos, la receta base de las galletas que hago, pero puede jugar con los sabores, sustituir el azúcar por miel, o, agregarle coco rallado y canela, o chocolate, ralladura de naranja o limón, incluso puede usar lo sólido que queda de la piña cuando hace jugo y lo cuela. Es a su elección. Se forma una masa homogénea y se hacen tortitas que serán horneadas en una bandeja a fuego medio alto hasta que dore.

Carnes
Pienso en pollo o cerdo que tan bien les queda ese sabor especiado. Si tengo tiempo prefiero macerar la carne con un poco de ajo, sal, pimienta y naranja agria. Para mí es opcional ponerle jengibre al adobo o agregarlo luego a la preparación en láminas o rallado. Después de un tiempo de reposo, escurro la carne y la doro en poco aceite, le echo el adobo donde se maceró y cocino hasta que esté tierno. Este plato también me gusta con salsa soja, a veces con ella sustituyo el jugo de naranja o le pongo ambos; también utilizo otros ingredientes, depende de lo que disponga en el momento.

En la comida asiática se utiliza bastante el jengibre. Recomendamos agregarlo a arroz frito, chop suey, chow main, así como en salsas y sopas. Ajuste las recetas a su gusto, necesidad y posibilidad; siéntase libre de experimentar y crear platos deliciosos.

Fotografía tomada de https://okdiario.com