Cien años de Ernesto Cardenal (+ POEMAS)
especiales

Ernesto Cardenal Martínez, poeta y sacerdote (Granada, 20 de enero de 1925-Managua, 1 de marzo de 2020).
El universo lírico del sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal es puente entre lo terrenal y lo espiritual, expresión de una inquebrantable fe en
la trascendencia.
Cien años se cumplen del nacimiento de un poeta que desde sus primeras obras reveló una sensibilidad especial para recrear la belleza y las
contradicciones del mundo, mientras prodigaba una visión crítica de los entramados del poder que anclan la injusticia.
Su escritura, marcada por un lenguaje diáfano y lleno de simbolismo, buscó siempre una conexión directa con la gente. El pueblo es el verdadero
protagonista del Reino de Dios en la tierra: ese era su credo.
Uno de los ejes centrales de la obra de Cardenal es su compromiso social, influenciado por la realidad de un continente herido por la pobreza y
la desigualdad.
Su poesía no se limita a describir la opresión, sino que se convierte en una herramienta para denunciarla y transformarla.
En obras como Salmos y Oración por Marilyn Monroe, Cardenal refundó una tradición lírica para dotarla de un carácter político y comunitario.
Desde su perspectiva, la poesía debía ser no solo un acto estético, sino también ético; una forma de luchar por un mundo más justo.
La dimensión espiritual de Cardenal, profundamente enraizada en su fe cristiana, aporta una riqueza inigualable a su poesía. Como sacerdote y
poeta, entendía el mensaje evangélico como una llamada a la acción transformadora, un camino hacia la liberación colectiva.
Su visión del Reino de Dios no se limitaba a una promesa celestial, sino que lo concebía como una realidad posible, aquí y ahora, mediante la
justicia social y la solidaridad entre los pueblos.
Esta convicción lo llevó a abrazar la Teología de la Liberación, corriente que busca reconciliar la fe cristiana con la lucha por los derechos de
los más desfavorecidos.
Ese movimiento tuvo en Cardenal a uno de sus más fieles representantes en la poesía. Sus textos ofrecen la idea de un Dios cercano, preocupado
por los pobres y comprometido con su liberación.
Este enfoque se plasma en su experiencia como miembro de la comunidad cristiana de Solentiname, donde integró arte, fe y acción social en un
proyecto transformador.
En sus versos, Cardenal entrelaza las imágenes bíblicas con las luchas contemporáneas, construyendo un discurso poético que une lo sagrado y lo
profano, lo divino y lo humano.
Esa poesía es un testimonio de su incansable búsqueda de la verdad y la justicia. Esa voz, serena y poderosa, sigue resonando como un llamado a
la esperanza y a la acción.
El Reino de Dios, según Cardenal, no es un sueño lejano: es la posibilidad tangible que comienza en la solidaridad y el amor.
POEMAS DE ERNESTO CARDENAL
Oración por Marilyn Monroe
Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra con el nombre de
Marilyn Monroe
aunque ése no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a
los 9 años
y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)
y ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial.
Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia
(según cuenta el Time)
ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo
y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.
Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.
Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno
pero también más que eso...
Las cabezas son los admiradores, es claro
(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz)
Pero el templo no son los estudios de la 20 th Century-Fox.
El templo de mármol y oro- es el templo de su cuerpo
en el que está el Hijo del Hombre con un látigo en la mano
expulsando a los mercaderes de la 20 th Century-Fox
que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.
Señor
en este mundo contaminado de pecados y radioactividad
Tú no culparás tan sólo a una empleadita de tienda.
Que como toda empleadita de tienda soñó ser estrella de cine.
Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del tecnicolor).
Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos
-el de nuestras propias vidas- Y era un script absurdo.
Perdónala Señor y perdónanos a nosotros
por nuestra 20 th Century
Por esta Colosal Super-Producción en que todos hemos trabajado.
Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes
para la tristeza de no ser santos
se le recomendó el Psicoanálisis.
Recuerda, Señor su creciente pavor a la cámara
y el odio al maquillaje insistiendo en maquillarse en cada escena-
y cómo se fue haciendo mayor el horror
y mayor la impuntualidad a los estudios.
Como toda empleada de tienda
soñó ser estrella de cine.
Y su vida fue irreal como un sueño que un psiquiatra interpreta y archiva.
Sus romances fueron un beso con los ojos cerrados
que cuando se abren los ojos
se descubre que fue bajo reflectores
¡y apagan los reflectores!
y desmontan las dos paredes del aposento (era un set cinematográfico)
mientras el Director se aleja con su libreta
porque la escena ya fue tomada.
O como un viaje en yate, un beso en Singapur, un baile en Río
la recepción en la mansión del Duque y la Duquesa de Windsor
vistos en la salita del apartamento miserable.
La película terminó sin el beso final.
La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.
Y los detectives no supieron a quién iba a llamar.
Fue
como alguien que ha marcado el número de la única voz amiga
y oye tan sólo la voz de un disco que le dice: WRONG NUMBER.
O como alguien que herido por los gangsters
alarga la mano a un teléfono desconectado.
Señor
quienquiera que haya sido el que ella iba a llamar
y no llamó (y tal vez no era nadie
o era Alguien cuyo número no está en el Directorio de Los Angeles
¡contesta Tú el teléfono!
Amanecer
Ya están cantando los gallos.
Ya ha cantado tu gallo comadre Natalia
ya ha cantado el tuyo compadre Justo.
Levántense de sus tapescos, de tus petates.
Me parece que oigo los congos despiertos in la otra costa.
Podemos ya soplar un tizón - Botar la bacinilla.
Traigan un candil para vernos las caras.
Latió un perro en un rancho
y respondió el de otro rancho.
Será hora de encender el fogón comadre Juana.
La oscurana es más oscura pero porque viene el día.
Levántate Chico, levántate Pancho.
Hay un potro que montar,
hay que canaleatar un bote.
Los sueños nos tenían separados, en tijeras
tapescos y petates (caeda uno en su sueño)
pero el despertar nos reúne.
La noche ya se aleja seguida de sus seguas y cadejos.
Vamos a ver el agua muy azul: ahorita no la vemos.
- Y esta tierra con sus frutales, que tampoco vemos.
Levántate Pancho Nigaragua, cogé el machete
hay mucha yerba mala que cortar
cogé el machete y la guitarra.
Hubo una lechuza a medianoche y un tecolote a la una.
Luna no tuvo la noche ni lucero ninguno.
Bramaban tigres en esta isla y contestaban los de la costa.
Ya se ha ido el pocoyo que dice: Jodido, Jodido.
Después el zanate clarinero cantará en la palmera,
cantará: Compañero
Compañera.
Delante de la luz va la sombra volando como un vampiro.
Levántate vos, y vos, y vos.
(Ya están cantando los gallos.)
¡Buenos días les dé Dios!
Muchachas que algún día
Muchachas que algún día leáis emocionadas
estos versos
y soñéis con un poeta:
sabed que yo los hice para una como vosotras
y que fue en vano.
Hazme justicia Señor (Salmo 25)
Hazme justicia Señor
porque soy inocente
Porque he confiado en ti
y no en los líderes
Defiéndeme en el Consejo de Guerra
defiéndeme en el Proceso de testigos falsos
y falsas pruebas
No me siento con ellos en sus mesas redondas
ni brindo en sus banquetes
No pertenezco a sus organizaciones
ni estoy en sus partidos
ni tengo acciones en sus compañías
ni son mis socios
Lavaré mis manos entre los inocentes
y estaré alrededor de tu altar Señor
No me pierdas con los políticos sanguinarios
en cuyos cartapacios no hay más que el crimen
y cuyas cuentas bancarias están hechas de sobornos
No me entregues al Partido de los hombres inicuos
¡Libértame Señor!
Y bendeciré en nuestra comunidad al Señor
en nuestras asambleas
Esta será mi venganza
Esta será mi venganza:
Que un día llegue a tus manos el libro de un poeta
famoso
y leas estas líneas que el autor escribió para ti
y tú no lo sepas.
Comentarios
María Gabriela
Añadir nuevo comentario