Aliados de Trump muestran lealtad al expresidente con una estatua dorada

Los conservadores estadounidenses elogiaron a Donald Trump en una reunión anual el viernes, e incluso revelaron una estatua dorada del expresidente, mostrando que sigue siendo una fuerza política republicana a pesar de las escenas violentas en Washington el mes pasado.

Destacados conservadores del Congreso, incluidos los senadores Tom Cotton y Josh Hawley y los representantes Steve Scalise y Matt Gaetz, se encontraban entre los leales a Trump que hablaron en la Conferencia de Acción Política Conservadora en Orlando, Florida, a la que Trump se dirigirá el domingo.

“Déjenme decirles algo: Donald Trump no se irá a ninguna parte”, dijo el senador Ted Cruz.

Las tumultuosas últimas semanas de Trump en el cargo vieron a sus partidarios lanzar un ataque mortal contra el Capitolio de los Estados Unidos el 6 de enero en un intento de impedir que el Congreso certificara la victoria electoral del presidente demócrata Joe Biden, una victoria que Trump afirmó falsamente que estaba contaminada por un fraude generalizado.

Si había alguna duda de que CPAC este año estuvo dedicado a Trump, la estatua del ex presidente, vestido con una chaqueta azul, corbata roja y pantalones cortos de boxeo rojos, blancos y azules, estaba en exhibición en el sitio de la conferencia.

La estatua generó burlas instantáneas en línea, y los comentaristas la compararon con el becerro de oro que enfureció al profeta Moisés en el Antiguo Testamento.

“La adoración de ídolos no es conservadora. #RestoreOurGop ”, dijo en Twitter el representante Adam Kinzinger, uno de los 10 republicanos de la Cámara de Representantes que votaron para acusar a Trump de incitar al ataque del 6 de enero.

Gaetz se declaró a sí mismo parte del ala "pro-Trump, Estados Unidos primero" del movimiento conservador. "No somos realmente un ala, somos todo el cuerpo", dijo.

También pareció pronosticar un papel futuro para Trump, quien está considerando otra candidatura a la presidencia en 2024: "Es posible que Trump no haya drenado todo el pantano, todavía".