Alarma en ONU ante numerosas muertes de civiles en Adén, Yemen

Por ello, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, reiteró su llamado a la máxima moderación y pidió a las partes adherirse al derecho internacional humanitario, recalcó su portavoz Stéphane Dujarric.

Las autoridades de la organización multilateral están muy preocupadas por el impacto de la violencia en los civiles: los informes preliminares indican que hasta 40 personas murieron y 260 resultaron heridas, indicó el vocero en un comunicado.

El secretario general de ONU también se refirió a la iniciativa de Arabia Saudita de convocar una reunión en Jeddah entre las partes interesadas, para resolver sus diferencias a través del diálogo, añadió Dujarric.

Asimismo, continuó, es fundamental que todos trabajen para garantizar que los eventos de los últimos días no conduzcan a una mayor inestabilidad en Adén o en otros lugares del territorio.

'Hacemos hincapié en que el conflicto en Yemen solo puede resolverse mediante un proceso político inclusivo'.

De acuerdo con ONU, más de 30 organizaciones humanitarias operan actualmente en Adén, y llegan cada mes a un promedio de 1,9 millones de personas con ayuda alimentaria y más de 1,6 millones con acceso al agua potable.

Además, el organismo multilateral tiene unos 300 empleados nacionales e internacionales trabajando en Adén, y aunque algunos se retiraron, se prevé que llegue más personal en los próximos días.

El puerto de esa ciudad, que es una de las principales puertas de entrada de bienes comerciales y humanitarios a Yemen, sigue en funcionamiento, mientras que el aeropuerto también volvió a abrir.

Reportes locales indican que este fin de semana aumentaron los enfrentamientos en Adén, luego de que el 7 de agosto un grupo armado intentó abordar las puertas del palacio presidencial en la capital temporal de Yemen, Adén, pero los guardias lograron detenerlos y abrieron fuego.

Las confrontaciones también llegaron muy cerca del aeropuerto de la ciudad y afectaron su normal funcionamiento.

Según Naciones Unidas, Yemen padece una de las más largas crisis humanitarias del mundo debido, en gran medida, al conflicto que enfrenta desde 2014 a tropas gubernamentales con rebeldes hutíes de Ansar Allah.

La crisis escaló en 2015 con el comienzo de bombardeos de una coalición contra la insurgencia, liderada por Arabia Saudita.