Izquierda vasca pide alianza de fuerzas soberanistas españolas

En un acto en la ciudad de Vitoria, en la norteña comunidad autónoma del País Vasco, Otegi planteó la necesidad de construir un pacto sólido entre EH Bildu, Esquerra Republicana de Cataluña y el Bloque Nacionalista Gallego.

El dirigente de la llamada izquierda abertzale (ideología nacionalista e independentista vasca) se pronunció en esos términos durante un acto con motivo del 43 aniversario de la matanza del 3 de marzo de 1976.

Ese día, cinco personas murieron y más de un centenar resultaron heridas por disparos de agentes de la Policía Armada -creada por el dictador Francisco Franco-, que acudieron a disolver una asamblea de trabajadores en Vitoria, capital de la provincia de Álava.

Al recordar esos hechos, Otegi afirmó que entonces el Estado quiso dar una 'lección a sangre y fuego' y dejar claro que había límites incuestionables: 'la unidad de España, la propiedad privada y la impunidad de los crímenes del franquismo'.

A su juicio, 43 años después, se presenta una coyuntura histórica parecida.

'El Estado español vive una crisis de régimen galopante, tanto en términos económicos como de vertebración territorial', y una muestra de ello es el adelanto de los comicios legislativos para el venidero abril, subrayó.

En ese contexto afirmó que es el momento de abordar una amplia alianza entre partidos progresistas vascos, catalanes y gallegos, similar a la lograda para las elecciones europeas del 26 de mayo entre su formación, ERC y el BNG.

'Todas las naciones sin Estado tenemos que confluir en una amplia alianza que juegue la partida contra el Estado (español) de manera unida, con una acción política común y un programa de mínimos', enfatizó.

Ese programa, anticipó, debe estar basado en la 'defensa del derecho a la libre determinación de los pueblos, políticas sociales antiaustericidas y antioligárquicas y libertad para todos los presos políticos del Estado'.

Todo ello para hacer frente al conservador Partido Popular, al liberal Ciudadanos y al ultraderechista Vox, a los que definió como el bloque reaccionario.

Pero también a la opción que representan el Partido Socialista Obrero Español y la agrupación antiausteridad Podemos que, según su criterio, 'no pueden aspirar a otra cosa que dejar las cosas como están'.