ESTRENOS DE CINE: Ilimitado

Ejemplos: Stanley Kubrick con 2001: odisea espacial; La matrix, de los hermanos Wachowski,… y una larga lista.

Por eso sorprende que Ilimitado —Upgrade, si se quiere su título original en inglés— use todos los lugares comunes del género y, aun así, salga airoso.

En un futuro en que —en mi opinión, puede estar a la vuelta de la esquina— las personas se valen de máquinas para cocinar, manejar y hacer otras de las actividades cotidianas, existe gente como Grey (Logan Marshall-Green), que prefiere utilizar sus propias manos para cocinarle algo a su esposa. Precisamente por ser así sufre doblemente cuando una bandada de delincuentes mata a su esposa y lo deja a él tetrapléjico.

Grey, luego de sufrir una depresión severa por no poder moverse, acepta que un genio informático le implante en la espina dorsal un dispositivo artificial que tiene la tecnología para mover su cuerpo. Para su sorpresa, el dispositivo, de nombre Stem, tiene vida y pensamiento propio y le habla a él dentro de su cabeza.

Los problemas comienzan cuando el dispositivo toma total control de su cuerpo y, más aún, de sus decisiones.

La cinta no quiere ser original. Toma prestado de Terminator, Robocop y Blade Runner cuanto quiere. Su única intención es entretener en el género de ciencia-ficción. Para eso, jamás deja caer su ritmo. Espero con ansias una segunda parte de este particular antihéroe.

Ya lo dijo Stephen Hawking: «llegará el día en que la inteligencia artificial sea superior a la de los seres humanos; a tal punto, que se ponga en peligro el futuro de la humanidad».

Otros han planteado aseveraciones más contundentes. Como es el caso de Elon Musk, orador sobre temas tecnológicos, que confesó su preocupación sobre el hecho de que, en el futuro, puede no ser muy descabellado ver a robots matando a gente en la calle.

Pero a Ilimitado (Leigh Whannell, 2018) no le interesa polemizar sobre la ambición del ser humano por convertirse en Dios ni hacer análisis filosóficos sobre las posibles consecuencias de un apocalipsis tecnológico. Aunque este es el tema que trata y definitivamente está sumergido en el género de la ciencia-ficción, su objetivo es ser más un thriller de acción que entretenga y deje a todos deseando una segunda parte. Y eso lo ha logrado.