Barranquilla en el ojo del huracán: El voly y la varilla dorada bien alta

Barranquilla en el ojo del huracán: El voly y la varilla dorada bien alta
Fecha de publicación: 
27 Mayo 2018
0
Imagen principal: 

Nuestro pie forzado tiene nombre de Leila Martínez y Maylén Delís, primera dupla femenina cubana en imponerse en el Tour Mundial de voleibol de playa, al llevarse el oro en la parada de Aydin (una estrella), Turquía encalidad de invictas, con cinco sonrisas sin fracaso, diez parciales airosos en línea y sentencia  (21-18 y 21-16) ante la fuerte pareja rusa y primera sembrada (Ksenia Dabizha- Daria Mastikova) en la definición, choque resuelto en 34 minutos, por cierto.

Antes, el binomio de Dalixia Fernández-Tamara Larrea, se habían agenciado sendas platas en Indonesia-2003 y Berlín-2004. Hace dos semanas Leila y Maylén se habían impuesto en la parada del balneario de Varadero correspondiente al circuito NORCECA.
Sorprende el rendimiento de esta dupla, especialmente por el hecho de que Maylén se unió a Leila a inicios de temporada, luego de que  Lidiannis Echevarría sufriera una lesión seria.

Por cierto, el dueto probará sus potencialidades en Rusia, otra fase del World Tour, como parte de su preparación con vista a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla.  Allí irán a preservar una tradición dorada pues en Veracruz- 2014 se impusieron la propia Leila junto a Lianma Flores; en tanto el dueto de Dalixia Fernández-Tamara Larrea coronó esfuerzos en Cartagena de Indias 2006.

Radiografiando a nuestras chicas, encontramos que se hallaban en el puesto 114 del ranking mundial con esos 640 puntos dorados como única comparecencia, posición que deben mejorar en lo que resta de campaña. Pese a poseer mayor kilometraje, Leila (27de abril de 1994) mide 1.80 metros y pesa 73 kilogramos. Por su parte Maylén (23/11/1993) mide 1.81, pesa 70 kg y descuella por su explosividad en el salto a la hora de atacar.

Ambas han conjugado esa fortaleza propia de nuestros elencos con inteligencia sobre la arena y deberán cuidarse en suelo cafetero de las anfitrionas Diana-Yuli (puesto 56), las venezolanas Gabi-Agudo (122) y las aztecas Orellana-Revuelta (144). De hecho Revuelta fue doble plateada en Cartagena de Indias y Veracruz.

Sergio-Nivaldo: Más contundentes

Si la dupla de Leila-Maylén ha demostrado poseer el potencial necesario para imponerse en tierras colombianas, sus homólogos Sergio González-Nivaldo Díaz se visualizan con mayor contundencia aún en la región centrocaribeña.

No exclusivamente por el hecho de estar situados en el peldaño 20 del escalafón universal (2 760 unidades), sino porque desde su irrupción en la élite tras el quinto escaño bajo los cinco aros en Río de Janeiro 2016 han sabido tutearse con los más sólidos exponentes de la disciplina, tanto en el World Tour, como en el último campeonato del orbe.

De hecho, en la recién finalizada parada de Itapema, Brasil, categoría cuatro estrellas y ganada por los anfitriones Evandro-André, recalaron novenos, con tajada de 400 rayas para su ubicación en el listado.

Los nuestros, a medida que ha avanzado su andadura como compañeros, han ganado en experiencia competitiva, dominio de los elementos de juego y la cancha, conocimiento y scouteo de sus oponentes… química y team work. Eso ha estado expresado en rendimientos en el entorno supremo que de seguro les permitirán superar a los mexicanos Virgen-Ontiveros (lugar 16-3 080 ptos), escollos más preocupantes de cara a Barranquilla.

Radiografiando a ambos miembros de la dupla antillana tenemos que Sergio (20 de junio de 1990) es el más experimentado. Pese a ser el de menor estatura (1.92 metros y 89 kg) la efectividad con la que bloquea constituye una de sus principales virtudes. Le confiere mesura a la pareja y siempre está anímicamente en condiciones de calzar a Nivaldo.

Este último mide 2.00 metros y pesa 81 kg. El servicio y la potencia en el ataque devienen sus principales armas de fuego, pero apenas posee 24 años y de seguro a medida que gane en madures, se convertirá en un jugador mucho más temible que lo que es actualmente.

De cualquier forma buscarán preservar su hegemonía de Veracruz 2014, cuando doblegaron a los morochos Jesús Villafañe-Jackson Henríquez, y mantener la herencia anterior que le dejaron en el 2006 Francisco Álvarez-Wilfredo Villar.

La sala no se vislumbra muy “limpia”

Si en la modalidad de playa nuestros exponentes salen con la mayor cantidad de papeletas doradas pre-competencia, sus hermanos mayores de sala no tienen el panorama muy claro.

De hecho, los combinados de uno y otro sexo culminaron en bronce en tierras veracruzanas. Muchos recordarán de forma ingrata aquel 2-3 adverso en las semifinales del certamen femenil frente a Puerto Rico, y el revés tan desconcertante 1-3 en la propia instancia ante los quisqueyanos en el concurso masculino.

Ahora, nuestras dos escuadras continúan en un largo proceso de renovación, luego de un año 2017 en el cual a nivel de armada élite, no se inscribieron en las principales lides del panorama Mundial como la Liga en el caso de los hombres y el Grand Prix para damas.
Esa ausencia fundamentalmente hizo que descendieran otros peldaños en el listado del planeta y hoy los hombres recalan en la plaza 16-60 ptos, y las mujeres en la 25-30.

De cara a Barranquilla deberán asumir todo el protagonismo que les exigirá el certamen, además de intentar involucrar al máximo a los suyos, Sulian Matienzo, Osniel Melgarejo, Javier Jiménez y el joven Miguel David Gutiérrez.

Entre damas República Dominicana, capaz de eslabonar una cadena dorada ininterrumpida desde San Salvador 2002 y bien rankeada en el puesto nueve del planeta, es la amplia favorita. Incluso Puerto Rico (escaño 13) ha tenido demostraciones de relieve en los últimos dos años, en tanto tampoco serán una panacea las anfitrionas (28), quienes vienen en ascenso. Con las boricuas hemos ganado y perdido pero las de Quisqueya se nos han tornado casi imposibles en el último lustro.

El prisma masculino quizás no sea tan abrupto. Eso sí, nuestro elenco deberá jugar sin cometer errores forzados en demasía si de imponerse se trata y retornar a un reinado que no acarician igualmente desde Maracaibo 1998.

México (posición 19), Venezuela (22) y Puerto Rico (29) se perfilan como los contrincantes más enconados. Uno de los principales hándicaps de nuestras selecciones, además de su juventud, es la poca cantidad de partidos de primer nivel que acumulan en los últimos 12 meses, más allá de lo que individualmente haya podido aportarles a cada uno de los contratados, el accionar en clubes pertenecientes a Ligas foráneas.

Así andan las cosas. Pocos pensarían que con el paso del tiempo, nuestro voleibol en el entorno centrocaribeño y del orbe, tuviera que verse obligado a hallar consuelo en los performances de sus representantes de playa.

Añoranza por aquellas espectaculares Morenas del Caribe y los inexpugnables hombres de fines de los 90, sí que la hay. Esperemos tener un bálsamo en Barranquilla.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.