Mundial de atletismo: los nuevos se rebelan
especiales
Ya en la previa apuntábamos que se trataba de una comitiva llena de caras nuevas, prácticamente todos debutantes en este tipo de lides, pero eso no los amilanó.
El jovencito de 19 años Juan Miguel Echevarría fue la sensación de la delegación caribeña, al coronarse en el salto largo con registro de 8,46 metros, una marca respetable a nivel mundial.
Además, Echevarría compitió como un consagrado ante el mejor saltador del planeta en la actualidad, el surafricano Luvo Manyonga, oro olímpico y del orbe, y el estadounidense Marquis Dendy, hasta entonces titular bajo techo. Ni siquiera se amilanó cuando lo bajaron temporalmente del primer puesto, y saltó aún más lejos. Su estilo irreverente le ganó muchos adeptos, y ojalá no sea otro talento perdido, porque mostró calidad y temple.
La otra presea de Cuba fue de bronce, al cuello de la heptatlonista Yorgelis Rodríguez. Ella sí estaba en los planes de luchar por una medalla, y la consiguió con acumulado de cuatro mil 637 puntos en las cinco pruebas que incluyen los certámenes techados. Estuvo incluso de líder luego de las tres primeras competencias, pese a una mala actuación en la impulsión de la bala, pero la sacaron del centro del podio luego de disputarse el salto largo y los 800 metros. No obstante, su puntuación constituye récord nacional para el pentatlón.
En cuanto a Yarisley, no pudo repetir la corona alcanzada en su anterior incursión en estas lides, en Sopot-2014, en una jornada en la que sus rivales estuvieron muy bien. La pinareña no pudo pasar de los 4,60 metros, aunque estuvo bien cerca de vencer los 4,70, por lo que finalizó en el séptimo escaño.
Confiábamos en su ímpetu y espíritu competitivo, pero no podemos olvidar que era su primera incursión bajo techo este año, y que cinco de sus contrarias llegaban con registros superiores a los 4,80 metros. Estamos todavía en el comienzo competitivo del ciclo olímpico, pero este resultado habla a las claras de cuánto debe mejorar para regresar a los planos que merece.
Los demás cubanos estuvieron más o menos dentro de lo esperado, y les queda incrementar los esfuerzos en las sesiones de entrenamiento para llegar en forma a su principal competencia del año: los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
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