Primero de Mayo: El sabio apunta a la luna, y el tonto le mira el dedo

En la peculiar coyuntura que vive hoy Cuba, inmersa en la actualización de su modelo económico, y considerando la crisis global que afecta al imperio del capital, lo acontecido en las principales plazas de la Isla para celebrar el Día Internacional de los Trabajadores es un acontecimiento único a instancia planetaria.

Los cubanos, por lo cotidiano que cada año resulta responder a la convocatoria de la Central de Trabajadores,  quizás no hemos conferido suficiente notoriedad a lo aquí acontecido este primero de Mayo. Pero que millones de trabajadores y pueblo en general, familias enteras, personas de todas las edades y credos, se sumen a marchas multitudinarias, de cientos de miles cada una, para ratificar su adhesión y compromiso con la realidad del país, es algo bien singular y útil termómetro para calibrar diferencias con el resto de las naciones.

Porque si bien en esta ínsula los protagonistas de los desfiles tenían por objeto ratificar su respaldo a la Revolución y al socialismo, comprometiéndose con el constante mejoramiento de una obra común;  en una significativa cantidad de naciones los móviles de los trabajadores han sido muy diferentes según recogen los titulares: “Día de los Trabajadores deriva en protestas en Centroamérica”, “Europeos protestan contra la austeridad en Día mundial del Trabajador”, “Lucha contra empleo no registrado marca 1ro de mayo en Argentina‎”, “Concretar cambios, consigna de uruguayos en Día de los Trabajadores”, “‎Encapuchados empañan manifestación del Día de los Trabajadores en Chile”, "Indignados intentan paralizar hoy a Nueva York”, “Huelga General Occupy en 115 ciudades estadounidenses”…

Sin embargo y pradójicamente, Google, la multimillonaria empresa poseedora del más empleado buscador de la Internet, destaca desde su propia presentación como más relevante acontecimiento de este día en el mundo, el aniversario 160 del natalicio de Ramón y Cajal, -un español Premio Nobel de Medicina en 1906-. Como si la celebración del primero de Mayo significara un suceso menor, como si los productores de las principales riquezas de este mundo no fueran los trabajadores, aun cuando estas, lamentablemente, estén tan mal repartidas.

Y lo más aberrante no es que hoy sea un primero de Mayo solo para conmemorar a los mártires de Chicago, sino que precisamente con ese motivo, las propias calles de Estados Unidos, incluso de la propia California donde Google tiene su sede central, son en este martes escenario de manifestaciones, huelgas y protestas de un cariz hasta ahora infrecuente por esas latitudes.

Mientras los diseñadores del megaportal Google se esmeraban para resaltar que hoy el asunto era evocar al médico Ramón Cajal, tal vez hasta sabían de la convocatoria hecha por los Ocupen Wall Street para bloquear el puente Golden Gate de San Francisco, y a lo mejor hasta habían sido testigos del paro de los trabajadores de los transbordadores que dan servicio en esa área de la bahía. Pero… no hay peor ciego que el que no quiere ver y, no lo hay más canalla que el que pretende enceguecer a los otros.

Lo acontecido hoy en Cuba pareciera que tampoco quiere ser visto por los grandes consorcios informativos, que “casualmente”, separan al unísono, como ante el disparo anunciador de la carrera, destacados espacios en sus primeras planas cuando el asunto es pretender empañar lo que aquí acontece, no importa sea multiplicando manipulaciones y mentiras.

De todas formas, este primero de Mayo protagonizado por los cubanos ha de inscribirse por derecho propio entre las excepciones del día en el mundo, por acá seguiremos apuntando a cada vez mejores claridades; y por allá, tratarán de seguir ocupándolas, aunque el sabio apunte a la luna y el tonto le mire el dedo.