Un gol para el Comandante

Días después de haberle dedicado un gol al fallecido líder cubano Fidel Castro el futbolista peruano Juan Elías Cominges insistió en sentirse satisfecho y orgulloso de su decisión.

«Lo invitamos y le agradecimos a nombre de nuestro movimiento deportivo y del pueblo de Cuba su valiente gesto de cariño y recordación al Comandante», escribió desde Lima el jefe de la misión deportiva cubana en aquella nación Eloy Oliveros.

«Durante el encuentro firmó además el Libro de Condolencias abierto en nuestra Embajada», sentenció.

«Cuando me enteré de la muerte de Fidel me sentí mucho más triste de lo que esperaba, muy emocionado, y surgió espontáneamente la idea de rendirle homenaje», relató a Prensa Latina el veterano jugador, respetado dentro y fuera de las canchas.

Entonces la idea fluyó y el pasado domingo tomó una camiseta sin mangas y escribió en ella “¡Hasta la victoria siempre, Fidel!” y se puso encima el uniforme rojo de su club Cienciano, de la segunda división de la liga peruana, y salió a la cancha esperando el momento preciso.

Y le llegó el martes, cuando anotó el primer gol del partido y lo celebró corriendo hacia las tribunas mientras se despojaba de la camiseta roja y mostraba con satisfacción la que llevaba sus palabras de homenaje al líder cubano,  saludadas también por los aficionados.

Cominges aclara que admira mucho al comandante, de manera reflexiva, pues no es partidario de idolatrar a ninguna persona, porque todos tienen alguna vez fallas, algo inherente al ser humano, pero insiste en señalar la enorme tristeza que le causó su partida.

Señaló que su admiración por el ex mandatario caribeño se debe a que lo considera un rebelde ejemplar, un hombre que quiso salir del molde, luchar por sus sueños y no rendirse jamás ante las dificultades, virtudes que lo conmueven.

Otro factor es la formación que recibió de sus padres, quienes lo educaron en los valores de la solidaridad y de pensar en los demás, a lo que agregó la pasión por la lectura y el estudio de la vida y la obra de Fidel Castro.

Por ahora no está interesado en hacer política y dice que tiene, cual si fuera una tarea pendiente, conocer Cuba, algo que no ha podido hacer porque su carrera, comenzada muy joven, lo llevó a otros países y las vacaciones eran obligatoriamente en Perú por consideraciones familiares.

Quiere conocer en particular cómo logró la isla de Fidel su importante desarrollo deportivo, y espera hacerlo pronto.