La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) constituye un cartel al servicio de la CIA estadounidense que confirma con sus acciones su agresividad hacia Cuba, denunció hoy un investigador especializado en estudiar la subversión contra este país caribeño.

De acuerdo con el periodista canadiense radicado en la isla Jean-Guy Allard, la más reciente prueba de la relación de la SIP con los planes de la inteligencia norteamericana fue la "designación de la cibermercenaria Yoani Sánchez como su representante en Cuba".

En un artículo que publica el diario Granma, el autor de varios libros y materiales sobre la hostilidad anticubana de Washington califica a Sánchez de "una vendepatria patentada, activamente promocionada por ciertas agencias de prensa internacionales, que se hizo rica con premios generados por el Departamento de Estado, por cientos de miles de euros".

Allard citó en su escrito al investigador chileno Ernesto Carmona quien señaló que los textos de Sánchez en la red se encuentran publicados en un servidor alojado en Alemania que es atendido por la compañía Cronos AR Regenburg, sucursal de la empresa Strato que no presta servicios a ciudadanos comunes, por ejemplo, a blogueros.

El registro del blog de Sánchez -develó Carmona- lo mantiene la empresa Godaddy, que es una de las compañías contratistas que utiliza el Pentágono en la ciberguerra propagandística de estos tiempos.

De esta manera, esa bloguera, quien vivió en Suiza y Alemania antes de regresar a Cuba para crear su blog Generación Y para difamar la isla y a su gobierno, tiene acceso a las tecnologías estadounidenses que el bloqueo de Washington prohibe para Cuba, subrayó el especialista.

Auténtica negociante de la desinformación pronorteamericana, Sánchez se encargará ahora de representar a la SIP, organización ultraderechista que se dedica permanentemente a atacar, calumniar y difamar a su país, apuntó.

Para Allard, desde su puesto la bloguera se atendrá a los planes que elaboran en Virginia -sede de la CIA- los cabezones de la guerra psicológica contra la América Latina Libre y soberana.

En el texto, el investigador relaciona el proceder de la SIP, que avala, según expone, su subordinación a los planes injerencistas de Washington en la región.

La SIP apoyó los golpes de Estado en Venezuela (2002) y Honduras (2009) y acusa de atacar a la prensa a los presidentes Hugo Chávez, Evo Morales y Rafael Correa, líderes de procesos revolucionarios, señaló.