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Horrible crimen que tiene que ser castigado con todo el peso de nuestras leyes, y una actuación de las autoridades que tiene que ser reconocida por todo nuestro pueblo, pero que esa es su razón de existir y no han hecho más que lo que tenían que hacer, aunque sería más importante el tratar de prevenir hechos de esta naturaleza, en lo que no dudo se trabaja intensamente,<br />Todos los hechos de sangre que se producen en Cuba, junto con otros delitos graves, o no tanto, sí se conocen, se conocen por Radio Bemba, o no se conocen, especialmente en las grandes ciudades. Desde que se eliminó radicalmente la llamada “crónica roja” (o “la página dos” de nuestros periódicos ¿cuántos cubanos no habrán escuchado la frasecita de “quedó en la página dos” y no tiene idea de su origen?) al mismitico inicio de la revolución, los cubanos, por lo general, quedamos de espalda a lo que sucedía de malo en nuestro entorno. Aunque de algunos tenemos conocimientos, siempre a mucho de ocurrir, cuando en un capítulos de algún espacio policíaco de nuestra televisión (Tras la huella, Días y noches, Mi propia guerra) nos lo pintan con detalles, tal vez edulcorados para no herir susceptibilidades, y siempre haciendo sobresalir la magnífica actuación de los agentes de la ley, personificados por primerísimos actores y actrices (Me encanta Mónica), que ya han pasado a ser altamente conocidos y reconocidos por el pueblo.<br />Sí se restablece que se den a conoccer las noticias de esa índole en los medios nacionales, como modo de “rectificación de errores”, al menos para mí, está muy bien. No me gusta estar ajeno a la realidad, y no se debe, vivir de espaldas a la realidad.