Puntualizan detalles sobre los nuevos precios en el comercio interior

A partir del primero de enero de 2021, cuando comience el ordenamiento monetario en Cuba, algunos de los precios minoristas de productos y servicios del Comercio Interior tendrán modificaciones y otros mantendrán un subsidio por el Estado.

Al intervenir en el espacio radiotelevisivo Mesa Redonda, Betsy Díaz Velázquez, ministra de Comercio Interior, explicó que en el caso del uniforme escolar del presente curso se continuará vendiendo al precio
actual, al igual que la canastilla de las embarazadas y el calzado profiláctico.

En todos se mantiene el sistema de venta y control, precisó, a la vez que señaló que se modifican los costos de los bienes de los programas de pacientes con incontinencia y los postrados.

Los productos alimenticios liberados como el pollo, las salchichas, los refrescos, las galletas, los aderezos y las pastas alimenticias, continuarán con los importes actuales y se modifican los de rones y
cervezas mixtas.

Díaz Velázquez llamó a mantener los precios por el sector no estatal y no subirlos de  manera abusiva y especulativa como está ocurriendo ahora ya que ganan más que el Estado, que los produce y debe buscar aseguramientos. 

Cambian los costes de productos lácteos, que es un sector en el que los niveles de importación son altos, y también de las conservas de frutas y vegetales, añadió la titular.

Los materiales de la construcción como el cemento, el acero, los elementos de piso y pared y la carpintería metálica se mantienen como hasta el momento, así como los productos de aseo e higiene.

Aclaró que el jabón no es un producto de la canasta familiar normada sino que está controlado por el contexto actual.

Modifican también sus precios los insumos agrícolas y se incrementan los de la ropa reciclada y los muebles y confecciones que se venden de manera liberada.

En el caso de los servicios técnicos y personales, subrayó que se emitió un listado oficial para servicios de barbería y peluquería, donde la red estatal hoy es mínima y predominan las formas de gestión no
estatal.

Había una limitante vinculada a tener o no el producto si el cliente lo lleva, ahora sí se puede prestar ese servicio con un descuento del 20 por ciento.

Las tarifas del programa de ahorro energético se modifican y depende mucho de la importación, lo que las encarece en alguna medida, señaló.

Respecto a la gastronomía popular –la que está ubicada en lugares de alta concentración como hospitales, terminales, centros estudiantiles, merenderos, centros estudiantiles- puede darse por formas no estatales también, dijo.

Añadió que los cambios se ponen a decisión de los consejos de administración municipal y que sus precios no deben crecer más de tres veces con respecto a julio de 2019. 

Los comedores obreros no están creados para obtener ganancias pero no pueden tener pérdidas, aseguró, por lo que las entidades deben establecer modificaciones para cubrir sus gastos y pueden incorporar una forma de gestión no estatal para brindar el servicio, siempre con la concertación de las organizaciones sindicales.

La merienda escolar mantiene la gratuidad para los estudiantes, con un menú balanceado, pero en el caso de los profesores sí deberán pagarla.