OPINIÓN: A leña limpia en Serie Nacional

Terminó la final de la 63 Serie Nacional de Béisbol, donde Las Tunas batió en cinco juegos a Pinar del Río, un enfrentamiento que lamentablemente se vio opacado por coincidir con los Juegos Olímpicos de París 2024.

No es la primera vez que ocurre, y volvemos a exhortar a todos los involucrados a que analicen mejor cuando se va a confeccionar un calendario, porque al final quien se resiente es el espectáculo que ellos mismos quieren potenciar.

Entrando en materia, los Leñadores no dieron mucho margen a duda y destrozaron los pronósticos de la mayoría, porque los pinareños fueron los mejores de principio a fin en todo el campeonato, con récord perfecto al ganar todas sus subseries, pero perdieron la más importante, la que ponía la corona en disputa.

Creo incluso que los favoritos sentimentales de la mayoría eran los Pativerdes, sobre todo por el aquello de premiar a Alexei Ramírez con un título del patio en su regreso a nuestros Clásicos.
Sin dudas, su presencia en el siempre entusiasta Capitán San Luis y en el resto de los estadios del país fue un plus para este torneo, y ojalá sirva de estímulo a otros para que refuercen los conjuntos de donde surgieron antes de marcharse a probar suerte en otras Ligas.

Junto a William Saavedra y Yasser Julio González encabezó el trío terrorífico que también implantó marca colectiva de cuadrangulares conectados en una campaña, y eso no se le puede quitar.

Por ahí precisamente me parece que estuvo el éxito para la tropa de Abeisy Pantoja, pues lograron dominar completamente a esa tanda, además de jugar de manera precisa a la defensa y desatar su acostumbrada ofensiva.

Por el contrario, los de Occidente, además de sufrir demasiado para fabricar las carreras, tuvieron deslices con el guante en momentos puntuales que también les alejaron de la victoria.
Con mucha sapiencia el alto mando de los tuneros manejó ese cuerpo de relevo encabezado por Alberto Pablo Civil, que completó la faena de los abridores liderados por el joven Eliander Bravo.

Evidentemente con los lanzadores que perdió Pinar por contratos internacionales en medio de la Serie (Erlis Casanova y Frank Luis Medina) otra pudo ser la historia, pero ya en nuestros campeonatos tenemos que acostumbrarnos a estas veleidades, y aumentará el trabajo para cada manager en cuanto a saber ajustar las piezas que le vayan quedando por el camino.

Así lo tuvo que hacer todo el mundo prácticamente, y a algunos les costó incluso la clasificación a la postemporada o la Liga Elite.

Mucho reconocimiento para los dirigidos por Alexander Urquiola, que sobre todo en el pitcheo volvieron a demostrar que son una tierra muy fértil en talento. Fue el regreso de un Grande, y esperamos que pueda mantenerse.

Las palmas para esos dueños del bosque en el Julio Antonio Mella, desde sus estrellas hasta el que jugó un solo episodio, porque todos aportaron su granito de arena en este evento jugado en condiciones bastante complicadas por esos horarios vespertinos. ¡Felicidades!