La actuación en Haydée Rosa, una decisión pensada y siempre añorada
especiales

Con la actriz Haydée Rosa compartimos estas líneas por haberse convertido, en poco tiempo, en un rostro esperado dentro de los múltiples conflictos que se tejen en la telenovela Regreso al corazón.
Luego de un referente como Yamila en Los hijos de Pandora, Haydée regresa a la pequeña pantalla para interpretar a una madre cubana sin filtros. Natural, espontánea, sincera, con un cúmulo de dudas e inseguridades, pero a la vez con la fuerza y la dignidad para hacer crecer a su hijo sin robarle la ternura, aun en las situaciones más difíciles.
Resultó muy grato dialogar con esta actriz para quien la actuación rige, en gran medida, el ritmo y sentido de sus días; y más cuando nos adelantó que seguiremos disfrutando de su trabajo en la pequeña pantalla.
—Tus inicios en la actuación… ¿fue una decisión pensada?
—Lo primero es que mi historia actoral se inicia en el teatro. Él ha sido parte de mi vida desde antes de nacer, porque mi mamá es graduada del ISA, justamente en el perfil de Teatro, y se ha dedicado toda la vida a enseñar arte teatral.
«Crecí en las aulas de la Escuela Nacional de Arte (ENA) y la de Instructores de Teatro (ENIT). Desde sus rincones veía los procesos de creación y montaje de obras tanto cubanas como universales. Y sí, siempre supe que había nacido en el lugar correcto. No tenía dudas de que eso era lo que quería, aunque sí sentía algunos temores de poder hacerlo, de lograr una actuación viva; temía no tener el talento necesario para ser actriz. Ese fue un gran error, porque no se puede vivir con miedo. Pero sí, definitivamente, la actuación siempre fue una decisión pensada y añorada».
—Personajes que te hayan marcado hasta hoy en tu carrera...
—Recuerdo con el dulce sabor de la primera vez el personaje de Delia en la película Sumbe, de Eduardo Moya y Raquel González. Esa experiencia lo cambió todo en mí
—¿Cómo llegas a Regreso al corazón y qué puedes contarnos de la experiencia de interpretar a Yolanda?
—Llego a la telenovela porque Loisys Inclán y Eduardo Eimil quisieron verme en un casting y me dieron la gran oportunidad de interpretar a Yolanda, un personaje hermoso y muy bien escrito por Yoel Monzón.
«Darle vida a Yolanda me ha regalado el cariño y el respeto de los televidentes, y eso es y será inolvidable para mí. Yolanda y yo nos fusionamos en el sentimiento de la maternidad: ella me dio la experiencia y yo le ofrecí mi cubanía».
—El momento más difícil del personaje
—Todos los momentos de un personaje resultan difíciles. Incluso los aparentemente más sencillos son complejos en su ejecución.
—Una anécdota que te haya unido con el personaje de Camilo
—Él me hablaba mucho de su mamá y yo a él de mi hijo. Así encontramos un equilibrio para nuestro sistema de relación. Rey Gessa es un actor muy talentoso y trabajador.
—¿Satisfecha con Yolanda?
—Me siento satisfecha con todas las bendiciones que me ha traído Yolanda: con el cariño del público, con el proceso de creación, con mis compañeros de reparto en la novela. Siempre quedan insatisfacciones, porque todo puede ser mejor; realmente me queda mucho por aprender y descubrir como actriz.
—Luego de este rol, ¿qué otros proyectos tienes?
—Vienen proyectos lindos y diferentes. Estoy muy feliz con mi nuevo personaje en la telenovela de Ernesto Fiallo, Mujeres de café. Es un personaje bellísimo, diferente a todo lo que he interpretado hasta ahora, y eso presupone nuevos retos. Me siento muy bendecida por formar parte de un elenco espectacular como el de esta propuesta.
En poco tiempo se despedirá del televidente Regreso al corazón, y qué bueno que Yolanda es de esos personajes que evolucionan en todos los sentidos, y lo hace desde una mesurada coherencia que mucho se agradece. De la misma manera, resulta grato saber que veremos a Haydée en una nueva entrega televisiva, para disfrutar de las muchas facetas que, de seguro, aún no quedaron develadas en Regreso al corazón, espacio en el que ya se inscribió, por pura autenticidad, en la teleaudiencia cubana.













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