Italo Calvino: cien años

Uno de los más interesantes juegos de la literatura del siglo XX es el que plantea el escritor italiano Italo Calvino en su novela Si una noche de invierno un viajero. Lector y personaje, realidad y ficción rompen fronteras en un entramado sugerente, de fino aliento lírico. Ahí están algunas de las claves de la obra de un autor nacido en Cuba, hace hoy justamente cien años, y que ha motivado numerosos acercamientos desde la crítica, el periodismo y la investigación literaria. Y lo principal: un narrador con legiones de lectores en todo el mundo. Téngase que en el momento de su relativamente temprana muerte, a los 61 años, en Siena, era el escritor italiano contemporáneo más traducido.

Hijo de un agrónomo con abultado historial político, y de una botánica con vocación pacifista, Italo nació en Santiago de las Vegas, donde su padre realizaba experimentos científicos. Su madre le puso Italo para que él tuviera siempre presentes sus raíces. No hizo falta el recordatorio, porque el escritor terminó por vivir en Italia. Y desde un decidido compromiso social participó activamente en el agitado devenir de su nación, antes y después de la segunda guerra mundial. Antifascista convencido, se unió a las brigadas partisanas durante el conflicto.

Justo en la segunda mitad de la década de los 40 comienza a ser reconocido como escritor. Transitó desde el neorrealismo de sus primeros libros, pasando por la expresión fantástica de novelas y conjuntos de cuentos posteriores, hasta la visión vanguardista de sus ensayos de la década de los sesenta. Aunque siempre preservó una independencia estética e ideológica, que explicaba puntuales rupturas con las líneas conceptuales de ciertos grupos literarios con los que se le relacionaba.

Cuba, país con el que nunca rompió vínculos, ha recordado al gran escritor italiano con una jornada de presentaciones de títulos, coloquios sobre su obra y certámenes literarios. Narrador fascinante, Italo Calvino sigue sorprendiendo a los lectores contemporáneos por su lúdica manera de desnudar los mecanismos de la creación en exquisitos ejercicios estilísticos. Ojalá que las acciones por su centenario se traduzcan en nuevos y entusiastas acercamientos a su obra inmensa.