DIARIO DEL FESTIVAL: A Baracoa...

Por fin se estrenó Baracoa, ópera prima de Luis Ernesto Doñas, una de las grandes expectativas de esta edición del Festival del Nuevo Cine Latinoamericano. La película se abre con la muerte de Felipe, un revolucionario italiano naturalizado cubano, detonante de un viaje inesperado que llevará a su hijo Pepe y al médico Jimmi al corazón más secreto de la isla.

Entre paisajes intensos, silencios cargados de sentido y encuentros que bordean lo insólito, el viaje hacia la remota Baracoa se convierte en una travesía donde lo surrealista y lo tierno conviven, y donde fuerzas opuestas encuentran finalmente un punto de reconciliación. Porque, como sugiere la cinta, las revoluciones verdaderas —las interiores, las humanas— nunca terminan.

Doñas, con una sólida formación en la FAMCA del ISA y en la EICTV, demuestra en este debut una madurez notable, fruto también de un recorrido que incluye experiencias en el cine y en la ópera. Haber trabajado como asistente de edición con figuras como Pavel Giroud, Fernando Pérez y Rogelio París, y luego como editor en La anunciación, signó un aprendizaje que hoy se advierte en la elegancia narrativa y el sentido del ritmo de su película.

Sus documentales y cortos previos ya insinuaban una voz propia, pero fue su salto a la dirección escénica en el prestigioso Fabbrica Young Artist Program del Teatro de la Ópera de Roma lo que terminó de abrirle horizontes estéticos que ahora confluyen con naturalidad en esta ópera prima.

Baracoa es también el resultado de una feliz coproducción italo–cubana, respaldada por Pointmedia Italia SRL y De la Huerta Producciones, con un equipo artístico y técnico mixto que recorrió la Isla hasta llegar a la Villa Primada.

El elenco combina figuras de peso internacional —como Giancarlo Giannini, quien llegó a Cuba por primera vez para el rodaje— con actores muy queridos por el público nacional como Carlos Luis González y Yadier Fernández, además de Giovanni Giusto, Ana Gloria Buduén, Paula Alí, Yordanka Ariosa y Mireya Chapman, entre otros. Esa pluralidad enriquece una historia que, más allá del paisaje físico, propone un viaje interior sobre la identidad, el amor, la amistad y la aceptación, donde cada kilómetro recorrido es también una transformación.

Otro de los grandes aciertos del filme es su música original, compuesta por Bárbara Llanes, una creadora reconocida sobre todo por su carrera como soprano, pero con un talento compositivo que aquí adquiere un protagonismo singular. Su obra, interpretada por la Orquesta de Cámara dirigida por la maestra Daiana García, dialoga con piezas italianas y cubanas ya existentes, dotando al filme de una sonoridad híbrida y profundamente emotiva.

Con Baracoa, Doñas entrega una obra sensible y poderosa, que celebra el encuentro entre culturas y confirma a su autor como una de las voces más prometedoras del nuevo cine cubano.