Así se titula la muestra bi-personal que hasta el próximo siete de agosto se encontrará expuesta en la galería solidaria Lorenzo Padilla, de la fundación homónima francesa, ubicada en la ciudad de Courtenay.

Obras de pequeño formato del artista visual Adrián Gómez Sancho y la fotógrafa Claudia Padrón Gómez, ambos matanceros, son presentadas al público galo para expresar la cotidianidad cubana desde técnicas distintas, la fotografía y la pintura.

De acuerdo con Gómez Sancho, “la invitación surgió en el año 2019 durante la XIII Bienal de la Habana en la provincia de Matanzas”. Ocurrió tras varios encuentros, y gracias a la estrecha relación, artística y solidaria de la Fundación Lorenzo Padilla con la ciudad yumurina, con el objetivo de “mostrar nuestro trabajo y compartir experiencias y, sobre todo, entrelazar las culturas cubana y francesa”.

Sin embargo, la invitación oficial realizada por el fundador de la Fundación, David Padilla, y su presidenta, Marie Padilla, no se pudo concretar de inmediato porque la pandemia de Covid-19 detuvo todos los procesos, hasta que, aliviada la situación mundial, fue este año cuando se llevó a cabo el proyecto.

La historia asombrada. Imagen donada por el entrevistado.

Asimismo, Gómez Sancho nos comenta que el título Reflejos Humanos “sugiere la conexión entre las obras de ambos y resalta el enfoque en la representación de la figura humana en diferentes medios del arte. Además, la inclusión del término Reflejos alude a introspección y exploración psicológica presentes tanto en los retratos fotográficos como en las pinturas antropomórficas”.

“La exposición Reflejos Humanos —continúa— nos sumerge en un fascinante viaje a través de la representación de la figura humana en diferentes formas artísticas”. Con las técnicas empleadas, ambos exploran la complejidad de la condición humana e invitan a reflexionar sobre nuestra propia naturaleza. El término Reflejos es puente emocional que conecta con la psique, y desvela aspectos profundos de la experiencia humana. Afirma, además, que desde esa mirada interior pretenden crear un diálogo directo y personal con cada espectador, invitándolos a explorar su propia identidad y emociones.

La muestra se compone por cinco lienzos de gran formato realizados con técnica mixta, “dígase acrílico, óleo, óleo pastel, carboncillo, y tienen insertados recursos y símbolos como la moneda cubana, la herradura, y fichas de damas que son ya algunos de los personajes recurrentes en mi trabajo”. Parte de esas telas pertenecen a la muestra Universos, el gran viaje, obras que conforman el CD-Universos del trovador cubano Tony Ávila, y que antes fueron exhibidas en la galería provincial de Matanzas, Pedro Esquerré, y más tarde una selección de ellas se adaptaron a la escenografía para un concierto del cantautor en el museo nacional de Bellas Artes, en La Habana.

Por su parte, las cinco fotografías de Padrón Gómez “de mediano formato impresas sobre Dibond y papel fotográfico, abordan distintos conceptos. Su inspiración y proyectos artísticos giran en torno a la nostalgia del olvido, la descontextualización y la reinterpretación de objetos personales y cotidianos; también nos acerca a la composición del mundo interior de los hogares y los escenarios sociales impredecibles”.

La artista del lente “utiliza la fotografía documental y conceptual para contar historias efímeras, curar angustias, expresar emociones íntimas y retratar personajes mitológicos. También se interesa por la crisis social cubana”.

Renpet-dibujo digital sobre fotografía. Imagen donada por el entrevistado.

Así es que, lienzos y fotografías integran la muestra Reflejos Humanos, una especie de diálogo en un mismo espacio, con el fin de proyectar hacia el espectador “la búsqueda constante, el detalle de cada textura, la forma, el color”.

Para Gómez Sancho se trata de “una experiencia única, nuestra estancia ha sido provechosa para nuestro desarrollo artístico y para conocer otra cultura. Poder visitar diferentes sitios, museos y apreciar cada detalle, creo, aumenta nuestro diapasón intelectual”.

“Realizar esta muestra en la propia Galería de la Fundación ha sido especial, —refiere Gómez Sancho— el apoyo brindado y la profesionalidad ha sido maravilloso y sólido. La Boutique Solidaria (Galería) situada en Courtenay, Francia, junto a su público, respetado y conocedor, ha desbordado un ambiente cálido y muy cubano. Nos complace muchísimo observar la armonía entre obras y espectador”.

“¿Qué esperamos? Que la exposición sea del agrado del público, que este proyecto sea el comienzo de otros más, y que la cultura cubana siga en ascenso. Agradecemos a la Fundación Lorenzo Padilla, a la Embajada de Cuba en Francia, y a todas las personas que lo hicieron posible”.

“Esta muestra Reflejos Humanos le suma a nuestro currículum una gran experiencia y regocijo infinito” —concluye.