Cuentos que se cuentan desde la televisión

¿Acaso alguna vez dejamos de imaginar cómo lucen los personajes literarios? La lectura y sus efectos. Uno de ellos es trascender los límites reales de cada página –ya sea impresa o digital– para idear acciones, ambientes, figuras. Por eso algunas personas se decepcionan (o no) cuando ven la adaptación de un texto escrito para los medios audiovisuales: teatro, cine o televisión.

Pero… ¿cuánto agradecería el público infantil un espacio que le enseñara a construir los protagonistas de sus historias preferidas?

Es esa una de las principales propuestas de Cuentos que se cuentan, proyecto televisivo de los Estudios de Animación del canal Cubavisión. Su objetivo, comenta el actor Falconerys Escobar, es propiciar el acercamiento a la lectura desde las edades más tempranas y desarrollar habilidades para que los niños dibujen y realicen sus títeres, y puedan representar en familia.

Algunas obras como El cuerno de las moralejas (Osvaldo de la Caridad Padrón) y Oros viejos (Herminio Almendros) funcionarán como pretextos de cada entrega.

Con idea original de Rafael Pérez Insua (director general del programa junto con Falconerys), se produce un paquete de 44 episodios dividido en dos bloques fundamentales. En uno de ellos conoceremos al abuelo Mate, quien enseñará el arte de contar historias mediante el uso de ilustraciones animadas. Mate es un reparador de libros y, mientras narra, los dibujos toman vida propia. Todo eso en aproximadamente 12 minutos en pantalla.

Para el segundo momento, llegará un juglar –uno moderno, claro está, pues todo ocurre en la contemporaneidad–. El bardo viajará con su carreta y sus títeres para presentar nuevos personajes también durante 12 minutos. Además, tendrá el gusto de demostrar cómo se construye un títere y otros aditamentos del teatro dedicado al público infantil.

Ambos anfitriones estarán en un mismo set y serán encarnados por una sola persona: Falconerys. Él valora a Mate como un adulto mayor metódico, reflexivo, y un poco lento para acentuar su lado tierno; mientras, percibe en el juglar “una alegría proyectada más hacia afuera para crear, quizás, lo espectacular”.

Sobre las actuaciones, el actor aclara que conllevan caracterización, manipulación de títeres y la confección de estos ante la cámara. “Con eso se juega, pero siempre hay que tener el espacio de las manualidades”, insiste. Súmese a ello la interacción con las animaciones de figuras planas y otros efectos visuales.

De ahí se puede deducir que se empleará la animación en dos dimensiones (2D). Sin embargo, será un proyecto diferente a lo que se está acostumbrado a ver en la Televisión Cubana. ¿Por qué? “Por la combinación de técnicas y por la estética que se quiere lograr, empezando por el mismo estudio donde los protagonistas darán inicio a las historias”, explica el animador Eduardo Ramírez.

Apunta, además, que se combinarán imágenes animadas y de la acción real a través de –como dice el título– cuentos. “Esto implica desarrollar varias aristas artísticas como edición, animación y efectos especiales que recreen un ambiente agradable. También se utilizará como apoyo para varios elementos el Motion Graphics”, concluye.

Si hablamos de las dificultades que supuso el programa en cuanto a montaje escenográfico, Yasser Álvarez Buzón no señala ninguna. “De eso se trata cuando se decide soñar”, enfatiza. El diseñador escenográfico y director de arte no considera que exista un elemento distintivo para esta puesta en ese ámbito, con respecto a otros espacios infantiles.

No obstante, afirma que el montaje de la escena –si bien responde a las exigencias del guion– implica “un sinfín de recursos y soluciones decorativas que puedan ser perfectamente aplicadas en cualquier hogar. Se trata de que padres, hermanos y la familia en general descubran que en todas nuestras casas está la fantasía, siempre está, es solo cuestión de apreciarla”.

Por una cuestión productiva, primero se filman los 22 capítulos correspondientes al abuelo Mate, luego se ocuparán del juglar, pues conlleva confección de títeres y otros movimientos de cámara… Y aquí te contamos otro detalle. El equipo desea que esta propuesta sea parte de los estrenos de Cubavisión para fines de año.

Acompañando a Rafael Pérez, Falconerys Escobar, Eduardo Ramírez y Yasser Álvarez, tenemos a los productores Tatiana Bravo y Dayan Herrera; y a los asistentes de dirección José Manuel Guzmán y Juan Manuel Hernández. En tanto, Doralgis García se desempeña en la ambientación, y José Manuel Guzmán comparte los guiones con Falconerys. Todos ellos laboran por estos días para que soñar, desde la literatura, sea completamente posible en “El canal de todos”.