Congresistas de EE.UU. repudian ataque armado a embajada de Cuba
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Las congresistas demócratas Bárbara Lee y Karen Bass, repudiaron el reciente ataque armado contra la embajada de Cuba en esta capital, sobre el cual, hasta hoy, sigue sin pronunciarse oficialmente el Gobierno de Estados Unidos.
'Los actos de violencia contra diplomáticos y misiones diplomáticas son totalmente inaceptables y deben ser condenados', expresó la declaración, citada este jueves en la cuenta de Twitter del embajador de Cuba en Washington, José Ramón Cabañas.
Lee, copresidenta del Grupo de Trabajo Bipartidista sobre Cuba, y Bass, presidenta del Caucus Negro del Congreso, ambas de California, dijeron sentirse muy conmocionadas y tristes tras escuchar sobre el acto de violencia cometido contra la embajada de la isla.
En la madrugada del pasado 30 de abril un individuo armado con un rifle seminautomático AK-47 disparó decenas de veces sobre el edificio de la sede diplomática, sin provocar daños humanos, pero sí afectaciones materiales.
'Nos alegramos de que no haya heridos', señalaron Lee y Bass en su comunicado, en el cual apoyaron 'firmemente la investigación del Servicio Secreto sobre este incidente'.
Diversas organizaciones y personas dentro de Estados Unidos que han rechazado el hecho demandan a la administración de Donald Trump una investigación exhaustiva sobre lo acontecido.
La agresión provocó, entre otros, el rechazo del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes del Congreso.
Indignado por el tiroteo en la embajada de Cuba en Washington D.C. (...) Debemos garantizar una investigación rápida y exhaustiva, manifestó el presidente de ese grupo legislativo, el demócrata Eliot Engel.
Hasta ahora solo la encargada de negocios de la embajada de Estados Unidos en La Habana, Mara Tekach, es la única funcionaria que ha realizado algún tipo de declaración lamentando el incidente que Cuba calificó de grave agresión terrorista.
Sin embargo, ni la Cancillería ni el secretario de Estado, Mike Pompeo, han hecho siquiera una condena pública formal, advirtió el embajador Cabañas en entrevista con Prensa Latina.
En cambio, Pompeo, en su primera alusión a Cuba un día después de la agresión, se pronunció en contra de las brigadas médicas cubanas que brindan asistencia a decenas de países en el mundo, enfatizó el diplomático.
Es esta retórica cargada de hostilidad la que ha privilegiado la actual administración y la que promueve acciones tan reprochables, indicó Cabañas.
Un informe policial preliminar se refirió a lo sucedido como un presunto 'crimen de odio', mientras medios locales de prensa filtraron la identificación del atacante, quien responde al nombre de Alexander Alazo, un cubano de 42 años, residente en Aubrey, Texas.
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