Código de las Familias en Cuba: Más cerca de decir: «Sí, apruebo»

Llegó el momento, el gran día. Desde el próximo 21 de julio, en el IX Periodo Ordinario de Sesiones del Parlamento, se discutirá la última versión del Código de las Familias, y se pondrá a disposición de la Asamblea Nacional la convocatoria al Referendo y su fecha.

Atrás en cada cuadra, esquina, comunidad del país quedaron recogidas a punta de lápiz los criterios y opiniones de las ciudadanas y ciudadanos que queremos vernos reflejados en la novedosa propuesta legislativa.

La versión 25 del proyecto de Código de las Familias, que incluye las modificaciones derivadas de la consulta popular, está disponible para su lectura y descarga en el sitio web de la Asamblea Nacional del Poder Popular.Con posterioridad, el Consejo Electoral Nacional organizará y llevará a cabo el proceso de Referendo, en el cual el pueblo decidirá sobre la aprobación definitiva del documento legal.

Nuestra sociedad debe conocer que en la versión 25 no se incluyeron cambios que limitaran el acceso de las personas en igualdad a instituciones jurídico-familiares como el matrimonio, la unión de hecho afectiva, la adopción y las técnicas de reproducción asistida.

Asimismo, no proceden aquellos que atentan contra la noción positiva de la crianza sin violencia, la responsabilidad parental y la autonomía progresiva de niñas, niños y adolescentes.

Reconoce expresamente el cuidado como derecho, amplía la protección de los menores de edad a las situaciones excepcionales y de desastre, refuerza la tutela urgente ante la discriminación y la violencia y extiende la posibilidad de denuncia a cualquier persona que conozca de esos hechos.

También, se incorpora la opción de hacer constar en escritura notarial la delegación de parte del ejercicio de la responsabilidad parental y de la guarda y los cuidados en favor de terceros.

La nueva versión añade además una variante para dejar enunciada la necesidad de la protección laboral, salarial o de asistencia social para cuidadores familiares que tienen edad laboral activa y que dejaron su profesión u oficio para dedicarse a ello.

En resumen, un documento que cada cubana y cubano debe hacerlo suyo, pues incluye a todas las personas y familias sin distinción. Refleja los diversos núcleos familiares cubanos, heterosexuales o no, consanguíneos o no, en fin el ajiaco que nos distingue en estos tiempos.

No permita que comentarios conservadores y malintencionados cierre las puertas a la felicidad de familias y personas que por años se merecen esa alegría. No forme usted parte de ese grupo discriminatorio y superficial. Son tiempos de decir: Sí, apruebo.