A 441 mil 691 ascendió hoy la cifra de muertes por la Covid-19 en Brasil tras la suma de dos mil 641 decesos en las últimas 24 horas, informó el Ministerio de Salud.

El boletín diario de la cartera indica además que se notificaron en el mismo periodo 79 mil 219 contagios y el total llegó a 15 millones 812 mil 55 desde que se reportó el primero en febrero de 2020.

La actualización señala que el estado de Sao Paulo continúa siendo el epicentro de la pandemia en el país al concentrar 105 mil 852 defunciones y tres millones 129 mil 412 infectados.

Tras alcanzar un récord de cuatro mil 249 vidas perdidas en un solo día (8 de abril) por la expansión de una variante más transmisible, el gigante suramericano registró una estabilidad en sus dígitos.

Sin embargo, aparece como segunda nación en el mundo con el número más alto de óbitos por Covid-19, detrás de Estados Unidos, y tercera en contagios, solo superada por la potencia norteña y la India.

Por los alarmantes guarismos y posible negligencia para enfrentar la pandemia se instaló hace tres semanas una Comisión Parlamentaria de Investigación que inquiere sobre la gestión del Poder Ejecutivo.

Este miércoles declaró en la junta el exministro de Salud Eduardo Pazuello, quien en todo momento protegió al presidente Jair Bolsonaro y trató de exonerarlo de responsabilidad ante cualquier indolencia en el desempeño del gobierno ante la crisis sanitaria por el patógeno.

Pazuello, general en activo, procuró eludir muchas interrogantes y mantuvo una acalorada polémica con senadores sobre la crisis en Manaos, capital del norteño estado de Amazonas, donde murieron pacientes en enero por falta de oxígeno en hospitales.

Indicó que el 10 de enero el Ejecutivo tuvo conocimiento de la carencia del elemento químico gaseoso en Manaos y dos días después comenzó el envío del insumo.

Detalló que la crisis se concentró en 13, 14 y 15 de ese mes y acerca de rechazar el envío de oxígeno de Estados Unidos, respondió que 'todas las ofertas' fueron aceptadas, pero que no podía decir por qué no llegaron.

Ante tal evasiva, el senador Eduardo Braga, de Amazonas, pidió honestidad a Pazuello y aseguró que la crisis en Manaos no fue de tres días sino de 20, cuando murieron cerca de 200 personas cada 24 horas ante la falta de oxígeno.

Durante un descanso en la junta, el exministro de Sanidad, el tercero que declara en las últimas dos semanas, necesitó atención médica y la sesión se suspendió para mañana.